Una vez más, la saga Call of Duty nos trae una nueva entrega para amenizar los últimos meses del año. El 6 de noviembre saldrá a la venta Call of Duty: Black Ops III para PS4, Xbox One, PC y consolas de pasada generación, y como ya es tradición, desde Treyarch y Activision claman que esta será el título más novedoso de la franquicia hasta ahora, con características nunca antes vistas y horas de diversión asegurada.
Podríamos entrar a debatir sobre esto, a listar todos los detalles que los desarrolladores han desvelado sobre el juego, pero eso ya lo hicimos, y si es lo que buscas te recomendamos que te pases por nuestro avance. Y muchos os preguntaréis: ¿Entonces qué quieren contarnos ahora?
Como no, Call of Duty: Black Ops III tuvo su hueco en el E3 del mes pasado, donde, además de mostrar un nuevo tráiler, ofreció a los asistentes la posibilidad de probar su campaña cooperativa. En Juegoreviews seguimos haciendo un seguimiento de los grandes títulos que hicieron acto de presencia durante el evento, y como Black Ops III no podía faltar, pasamos a comentar todo lo que esa demostración ha revelado. ¿Preparados?
La demo arranca con una breve introducción cinemática en la que nos explican quién es nuestro personaje. Somos un soldado de élite, un humano que ha sido modificado genéticamente y al que han hecho algún que otro upgrade a modo de implantes tecnológicos, hardware, etc.
Estas nuevas “herramientas”, las cyber core, nos han convertido en auténticas fieras del campo de batalla. Nos indican dónde están nuestros compañeros de equipo, nos dan información sobre el terreno, los enemigos, etc. Además, también nos ofrecen sofisticadas habilidades, perfectas para la guerra. Podemos seleccionar y deseleccionar una habilidad u otra en función de nuestras necesidades. Por ejemplo, podemos paralizar durante unos segundos a los robots enemigos, tomar el control de un vehículo robótico, hacer que un exo-traje ataque a su portador, cegar temporalmente a los enemigos humanos, etc. La lista de habilidades es larga.
En la introducción nos muestran tres de estas habilidades en acción. La primera nos permite arrojarnos con fuerza sobre el terreno, provocando una onda expansiva que acaba con los enemigos cercanos. La segunda nos permite tomar el control sobre la maquinaria enemiga, en este caso un dron con el que podremos atacar a los enemigos. Con la tercera podemos destruir las rodillas de los robots enemigos de una sacudida eléctrica.
Visto esto, arranca la auténtica demo. La misión mostrada se llama Rise and Fall, y está ambientada en un Egipto futurista. Todo arranca cuando la misión que el equipo está llevando a cabo se tuerce, cuando el helicóptero que estaba llevando un muro protector es derribado. El equipo, formado por cuatro jugadores, debe enfrentarse a las maquinarias que les atacan indiscriminadamente y que intentan acceder a la Estación Ramsés.
La pantalla se divide rápidamente en cuatro, y podemos ver como los soldados se enfrentan a los distintos enemigos. Cada clase de soldado tiene unas armas y herramientas específicas, pero nos centraremos en hablar de los movimientos del “personaje central”.
Tras un tiroteo inicial y deshacerse de algunos enemigos, utiliza sus habilidades para detectar las debilidades de la estructura donde se encuentran los rivales, algo que aparece en la esquina superior izquierda de la pantalla. Con esta información, lanza una mina en uno de los puntos débiles, consiguiendo que el edificio se derrumbe por completo.
El siguiente paso es tomar el control de uno de los drones enemigos y utilizarlo para atacarlos. Durante este tiempo nuestra “vista” cambia a la del dron, y cuando pasa el tiempo de control volvemos a la perspectiva de nuestro personaje.
La batalla continúa, y la perspectiva cambia de un personaje a otro, permitiéndonos ver el nuevo set de movimientos que introduce esta entrega. Ahora podemos correr por las paredes, esprintar sin agotarnos, derrapar, etc., lo que sin duda nos da multitud de posibilidades para afrontar los combates.
A mitad de misión aparece una cinemática, en la que los “protas” logran hacer explotar el campo de batalla, deshaciéndose de los enemigos. Sin embargo, es pronto para bajar la guardia. Otra tanda de enemigos intenta acceder a la Estación por otro camino, y enseguida se lanzan a su encuentro.
Los cuatro personajes avanzan por las callejuelas de la ciudad hasta que se topan con otra zona de combate. Esta vez, en lugar de la gran explanada abierta están atrapados en pequeñas calles, lo que ofrece una perspectiva más real del combate urbano y de cómo se desarrolla realmente la guerra en una ciudad. En esta zona, los soldados se mueven entre callejones y dentro de los edificios para intentar sorprender a los enemigos, que aparecen resaltados.
Finalmente llegan a la zona donde el helicóptero del principio se ha estrellado. Tras lograr acceder al interior del vehículo intentan salvar la vida del piloto, arrancando una nueva cinemática. Por desgracia todo se tuerce, y el helicóptero se precipita al vacío. De esta forma los personajes se encuentran de nuevo en un escenario más abierto, un gran campo de batalla donde deben repeler a los enemigos.
En esta batalla volvemos a ver algunas habilidades en acción. Por ejemplo, un soldado rival es inmolado, literalmente, mientras otros son derribados con brutales ataques cuerpo a cuerpo.
Sin embargo, los grandes enemigos a abatir son gigantescos robots, mezcla de mechas y tanques, contra los que los soldados utilizan todo su arsenal.
Durante unos segundos, uno de los jugadores logra tomar el control sobre una de estas maquinarias, empleándola para deshacerse de los humanos que el cortan el paso y empezar a disparar contra la gran mecha enemiga.
Rápidamente la batalla se descontrola, todo el escenario se llena de enemigos y las explosiones surgen por doquier. En este sentido, Call of Duty vuelve a triunfar mostrándonos el auténtico caos de un conflicto bélico.
La demo termina cuando estas maquinarias son destruidas con grandes explosiones. Después, el vídeo concluye con una marabunta de imágenes cargadas de acción de la campaña principal.
Por lo visto hasta ahora, parece que con Black Ops III la saga ha recibido algunas mejoras que los fans ya pedían a gritos. La nueva variedad de movimientos, el correr sin límites o los reacciones acrobáticas son de agradecer, así como la multitud de habilidades que podremos utilizar durante los combates. Mención especial también tienen los escenarios, que por la demostración parecen gigantescos, pero no por ello faltos de detalles.
En definitiva, Black Ops III quiere convertirse por derecho en la mejor entrega de la saga, y está luchando duramente para conseguirlo. Habrá que esperar para saber si está en su mano conseguirlo, pero si no hay ningún inconveniente, no hay duda de que será una gran entrega que los fans de la franquicia estarán locos pos jugar.
Call of Duty: Black Ops III- Puntos a tener en cuenta:
- Esa libertad y variedad de movimientos pueden dar mucho juego. Ha sido un acierto salir de los pocos movimientos prefijados de las anteriores entregas.
- Promete grandes dosis de acción en escenarios aún más grandes. Atentos.