Parece ser que la moda del “ya te pagaremos” no es cosa solamente de los “trabajos basura”. En las altas esferas de la industria del videojuego al parecer también “cuecen habas”
Ya es sabida la polémica y el revuelo que se montó al hacerse pública la demanda que impuso el compositor de la banda sonora de Halo a Bungie. El demandante Martin O’Donnell, cuya última obra para la compañía podemos disfrutar en la Beta de Destiny, alega que la demanda ha sido impuesta por no pagarle trabajos que había realizado para la compañía en la que había trabajado la friolera de 14 años y tras un “sospechoso” despido en mayo del presente año en el que las razones quedan a juicio de los mal pensados.
Finalmente los tribunales dieron la razón al compositor, el cual se reembolsará la cuantiosa cantidad de 100.000 dólares por “trabajos no remunerados” y “daños y perjuicios”.
Además otra noticia más le ha debido caer como un jarro de agua fría a Bungie. Es posible que pensaran aquello de “bueno, toma tu dinero y lárgate de mi vista…”. Pues no, ni siquiera eso. A partir de ahora las reuniones de accionistas van a ser de lo más “tensas” tras la obligación de devolver a O’Donell su porcentaje de acciones de la compañía, que al parecer le fueron arrebatadas sin justificación.