Avance Mafia III, bienvenidos a la convulsa Nueva Orleans de finales de los 60

Mafia se ganó a pulso su puesto como una de las sagas sandbox más respetadas gracias a la calidad de la que hicieron gala sus dos primeras entregas, y en concreto una segunda parte que aún sigue haciendo mucho ruido pese a que hace ya cinco años que aterrizó en las tiendas. ¿Sus claves? Más allá de la diversión y la libertad de acción propias de cualquier buen sandbox, Mafia II brillaba por su sensacional ambientación en los años 40, situándonos en el centro de una historia de mafiosos de las buenas, con un protagonista que empieza desde lo más bajo y va a abriéndose camino mientras somos testigos de cómo se corrompe, de cómo caen sus amigos y de cómo golpea violentamente a sus enemigos.

Pues bien, el caso es que llevamos cinco largos años esperando una tercera entrega que nos permita continuar con la historia de Vito y compañía en la mítica Empire Bay, esa ciudad corrupta hasta los cimientos que nos ganó completamente. Y sí, desde hacía un tiempo sabíamos que su compañía responsable, 2K Games, se guardaba alguna sorpresa al respecto. Finalmente dicha sorpresa ha sido liberada en el marco de la GamesCom 2015 con la presentación en sociedad de Mafia III.

Ahora bien, Mafia III no es una secuela de Mafia II. Cambia completamente de protagonista, de ciudad y hasta de época, transportándonos a la carismática Nueva Orleans de finales de los años 60, con su música de jazz, sus pantanos y su magia negra.

Vale, puede que dicho cambio radical no haya sentado bien a todos los fans de la franquicia. Sin embargo, ¿no estáis ya un poco hartos de recorrer ciudades inspiradas (o en ocasiones auténticas recreaciones) en Nueva York, Los Ángeles, San Francisco y Chicago? A nosotros particularmente nos flipa la posibilidad de jugar en Nueva Orleans, igual que le flipará a todo aquel que haya visto la serie Treme. Por su colorido, por su música, por su diversidad cultural y por sus gentes tan variopintas nos parece un enclave idóneo para un videojuego, y más aún si se trata de uno que preste tanta atención a la narrativa y la ambientación como la serie Mafia.

Si a esto le sumamos una época tan carismática como finales de los años sesenta, una época en la que la música pegó un salto de gigante gracias a leyendas como Jimi Hendrix, Bob Dylan, The Rolling Stones y Janis Joplin… ¡apaga y vámonos! Además a finales de dicha década Estados Unidos atravesaba una etapa sociocultural realmente convulsa. Grandes cambios se cocían en el aire, y los grandes cambios suelen ir unidos a sucesos trágicos.

Para empezar se emponzoñaron hasta el cuello con la Guerra de Vietnam, por lo que muchos jóvenes, sobre todo de clase media-baja, cruzaron el Pacífico para luchar en una guerra que ni siquiera llegaron a entender. Por otro lado, en suelo americano, el movimiento hippie recorre el país enarbolando la bandera de la paz en contraposición a la guerra y a toda una serie de crímenes raciales que sacuden lo más profundo de la sociedad. Tomando un dato concreto, Martin Luther King, gran defensor de la igualdad y líder del Movimiento por los derechos civiles, fue asesinado en marzo de 1968, mismo año en el que da comienzo la trama del juego. ¿Casualidad? Nos da que no.

Tampoco puede faltar, por supuesto, la mafia. Y vale que no nos encontramos ante la típica mafia italoamericana de los años 40, pero los ideales siguen siendo los mismos. Por encima de todo prima la familia, el dar trabajo y protección a tus semejantes y a aquellos que realmente te respetan. Y sí, para conseguirlo no queda otra que romper la ley realizando labores de extorsión o comerciando con sustancias ilegales.

Pues bien, nuestro protagonista es un reflejo de toda esta convulsión. Estamos ante un joven de color bastante tocado por haber participado en la Guerra de Vietnam cuya familia ha sido asesinada, por lo que decide ‘crear’ una nueva familia con tres lugartenientes que serán los encargados de apoyarnos en todo momento.

A nivel puramente jugable nos encontramos ante un sandbox que quiere explotar todas las posibilidades del género. La idea es abrumar al jugador con una libertad sin precedentes, permitiendo que podamos ir a donde queramos en cualquier momento, contando con decenas de misiones principales y secundarias, además de toda una serie de retos y desafíos. Destacar que tendremos muchas más formas de infringir la ley que en sus predecesores, y eso es algo que suena realmente bien.

La ciudad de Nueva Orleans estará dividida en una serie de zonas controladas por diferentes bandas. Y sí, la guerra entre ellas será una constante que derivará en tiroteos callejeros y frenéticas persecuciones. Para controlar a dichas bandas tendremos que hacer uso de la violencia, por supuesto, pero también esperamos poder imponer nuestro dominio mediante acciones más ‘diplomáticas’.

Para ayudarnos a mantener nuestras zonas en orden y expandirnos podremos echar mano de la figura de nuestros tres queridos amigos, quienes en más de una ocasión serán los encargados de cumplir con aquellas tareas impropias de un líder, para que no nos manchemos las manos. Y dependiendo de a qué lugarteniente le asignemos cada distrito, obtendremos una serie de recompensas.

Por lo demás Mafia III promete ser un espectáculo visual a la altura de la nueva generación de consolas y PC. Los anteriores juegos de la franquicia rallaban a muy buen nivel, y es de esperar que esta nueva entrega cumpla a la perfección en dicho sentido.

En conclusión nos encontramos ante un título que tiene ante sí la difícil tarea de mantener el listón de sus predecesores. Sin embargo no podemos sentirnos más optimistas debido a que uno de los factores más importantes en todo buen juego de la serie Mafia lo encontramos en la ambientación, y tanto la localización como la época elegida por su estudio responsable, Hangar 13, nos parece sencillamente la mejor posible.

Ahora ya sólo nos queda esperar a que Mafia III cumpla sus promesas en términos jugables, ofreciendo una gran libertad de acción y una variedad de misiones suficiente como para entretener al jugador durante semanas. Si consigue eso ya sólo falta que su violencia visceral, su trama adulta y su elaborada narrativa terminen de rematar la faena para poder decir que nos encontramos ante uno de los grandes juegos de 2016.

Mafia III – Puntos fuertes: