Se ha hablado hasta la saciedad del presidente de Estados Unidos y el terrorista más buscado en el mundo. Los trágicos acontecimientos del 11 de septiembre de 2001 han desencadenado un copioso caudal de información, cuyos efectos son patentes en la actualidad. No en vano, George Bush y Bin Laden son, en opinión de Diego Iturriaga, “los dos personajes más relevantes del siglo XXI”.
Para el historiador no cabe duda de que “el mundo cambió” entonces. Seis años después de aquella infausta fecha son evidentes alguna de las decisiones que desencadenó el atentado, como la intervención en Afganistán o la guerra de Irak. Esta fue la tesis que defendió el martes durante la conferencia que impartió en el Espacio Fundación Caja Rioja-Santos Ochoa bajo el título George Bush y Bin Laden o la creación del héroe y el villano a través de los medios de comunicación.
Sin embargo, son muchos los que opinan que se trató más de un acontecimiento periodístico que histórico. “Es la eterna duda acerca de qué es Historia. Tradicionalmente se relaciona con el estudio del pasado, pero también es perfectamente aplicable al estudio del presente”, apostilla. Diego Iturriaga afirma haber dirigido a sus alumnos la siguiente pregunta: ¿Qué fue más importante la caída del muro de Berlín en 1989 o el atentado del 11-S? Por lo general, la respuesta más habitual suele hacer referencia al suceso que propició el desmantelamiento del régimen soviético. El historiador, por supuesto, no piensa así.
INVESTIGACIÓN
Diego Iturriaga ha dedicado los últimos seis años al estudio del terrorismo fundamentalista, línea de trabajo que compagina con otra vinculada a la historia social de La Rioja. Los medios de comunicación constituyen las fuentes de información más habituales en su labor investigadora. En este sentido, Internet permite el acceso a publicaciones internacionales, caso de los semanarios Time o Newsweek y la publicación alemana Der Spiegel. También hace un especial seguimiento de las secciones de intenacional de El País y El Mundo.
Iturriaga destaca cómo El País, en concreto, modificó su línea editorial con respecto al presidente estadounidense tras el 11-S. “Empezó entonces la construcción de la figura de héroe”, señala. Ejemplo de ello fue el uso reiterado de planos contrapicados en las fotografías del presidente norteamericano, lo que contribuyó a engrandecer su figura, “capaz de acoger en sus brazos a toda la humanidad”, recalca Iturriaga.
Bush y Bin Laden o la creación del héroe y el villano a través de los medios de comunicación se incluye dentro del ciclo Personajes de nuestro tiempo, organizado por el Grupo de Investigación de Historia de Nuestro Tiempo, al que pertenece el propio Iturriaga.