La plataforma Democracia Real Ya se va a mantener en pie con distintas convocatorias a la movilización contra los actuales partidos y en protesta por el deterioro de la situación política y económica. Han sido cientos de jóvenes los que han desafiado a las autoridades y desde que cayó la tarde en la capital volvieron a concentrarse en el mismo punto en que terminaba la manifestación que reunió a cerca de 30.000 personas, según los organizadores, en la jornada dominical.
En la Puerta del Sol y custodiados por los antidisturbios, que durante el domingo la emprendieron con una pequeña parte de los manifestantes, volvían a montar el campamento con sacos de dormir y tiendas de campaña su idea es aguantar hasta el próximo 22 de mayo, fecha en que se celebran las elecciones municipales y autonómicas.
Han permanecido hasta las 05:30, hora en que la operación policial los ha desalojado de la Puerta del Sol, a pesar de que decenas de vecinos madrileños se han ido acercando a lo largo de la noche para solidarizarse con el movimiento y, sobre todo, con su protesta. A primera hora de este martes, está previsto que celebren una asamblea para organizar las protestas el resto de días que restan hasta el 22 de mayo. Y, a mediodía, se dirigirán hasta Plaza de Castilla para recibir a los 24 compañeros que fueron detenidos en la medianoche del domingo.
Quieren hacerse visibles y hacer llegar su protesta no sólo a la sociedad, sino a los políticos que durante la jornada del lunes ya empezaban a tomar nota, especialmente desde la izquierda que advierte en los miles de jóvenes manifestados el pasado domingo gran parte de su potencial electorado que ha decidido salir a la calle para protestar contra una situación insostenible que al final ha estallado: los españoles no toleran a su clase política. Lo advertía el CIS en sus últimos sondeos. Sólo por detrás de la maltrecha situación económica provocada por la crisis y, por supuesto, el paro. Ahí se encuentran los políticos en los que los españoles no confían. Ni en el Gobierno ni en la oposición.
Democracia Real Ya optó por difundirse a través de las redes sociales y tanto PSOE como PP conocían las intenciones de los convocantes. Del lado de los populares confían en que su electorado no se encuentra entre los manifestantes y, a lo largo del lunes, admitían en la calle Génova que este tipo de protestas no hacen si no empujarles a un victoria el próximo domingo que ya creen contundente. Sin embargo, los socialistas llevan semanas observando con atención la evolución de este movimiento que ha estallado en muchas ciudades españolas. Del lado del PSOE si ven peligrar su suelo electoral en estas protestas. No en vano, el domingo pudieron verse un gran número de pancartas en las que podía verse al presidente Zapatero con Emilio Botín entre consignas coreadas como “Generación ni ni: ni PSOE ni PP”.
Con este movimiento al PSOE le pasa factura la crisis como una apisonadora, ya que los miles de manifestantes, especialmente jóvenes, que han salido a las calles comparan una formación con otra en detrimento claro de los socialistas. La falta de expectativas laborales, el imposible acceso a una vivienda, un salario precario y a veces ni siquiera mileurista ha irrumpido en la campaña de las elecciones municipales y autonómicas en un movimiento al que se han ido sumando ciudadanos, muchos también por “solidaridad” y otros porque se consideran “víctimas injustas del sistema”.