El viceconsejero de Educación, Universidades y Formación Profesional, Miguel Ángel Fernández, ha anunciado que a partir de la próxima semana la página web de la Universidad de La Rioja (UR) publicará la estructura básica de los exámenes de la Prueba de Acceso a la Universidad (PAU) y los criterios generales de evaluación de cada materia.
Fernández y la vicerrectora de Estudiantes y Extensión Universitaria de la UR, Marian Martínez Calvo, han presidido hoy la segunda reunión de la Comisión Organizadora de la PAU para este curso, en la que se han abordado los criterios de organización, estructura básica de la prueba y criterios generales de evaluación, con la finalidad de “ir preparando la nueva propuesta de acceso a la universidad que incorpora importantes novedades debido al cambio normativo”.
En concreto, Fernández ha explicado que tras la aprobación el pasado mes de junio del Real Decreto 534/2024 que regula la prueba de acceso a la Universidad, la Comisión Organizadora de la PAU está trabajando en las principales novedades que conlleva para regularizar y establecer la prueba de acceso a la universidad a partir de este curso.
Así, en la primera reunión celebrada el pasado 18 de septiembre con los coordinadores de materia, “se les explicó cuáles eran las principales novedades que establece el nuevo marco normativo de la PAU para que pudieran presentar una estructura de examen con unos criterios de corrección antes del próximo 15 de octubre”, ha declarado Fernández. “Aunque ya hemos recibido algunas propuestas, vamos a esperar a tener las estructuras de prueba de todas las materias para poder publicarlos juntos a partir del próximo miércoles, 16 de octubre”, ha avanzado.
Acuerdo entre comunidades del PP para homogeneizar la PAU
No obstante, el viceconsejero de Educación ha recordado que desde el pasado curso 2023/2024 “estamos trabajando de manera conjunta con doce comunidades autónomas en un modelo común de prueba de acceso a la universidad”. También ha precisado que la Conferencia de Rectores de las Universidades españolas (CRUE) establece una serie de criterios mínimos generales para todos los distritos universitarios españoles. De esta forma, “existe un acuerdo entre universidades y comunidades autónomas para intentar homogeneizar esta prueba, que sea lo más equitativa posible y que el alumnado no se vea afectado por realizar la prueba en una Comunidad o en otra”.
Además, ha resaltado que “ya están trabajando los coordinadores de materia con los profesores de segundo Bachillerato para realizar estas propuestas de estructura de exámenes, que en algunos casos han asumido y otros están revisando”.
Entre las novedades de la prueba de acceso de este curso, además del cambio de nombre, que pasa de denominarse EBAU a PAU, unifica las fechas evaluación en toda España, celebrándose los próximos días 3, 4 y 5 junio; el orden de las materias de las que se van a examinar los alumnos será el mismo; y tendrán criterios generales de corrección ortográfica, con la misma penalización.
Con todo el trabajo que se está realizando y con las propuestas de estructuras de exámenes que están analizando los coordinadores de materia, Fernández ha subrayado que “existen bastantes elementos que dan certidumbre a la nueva PAU, para que a partir de la próxima semana las dudas que puedan tener los alumnos estén resueltas”.
Huelga convocada este viernes
Este viernes hay convocada una protesta estudiantil para reivindicar que, un mes después del inicio del curso, siguen sin conocerse muchas cuestiones de esta prueba. Hoy, la Plataforma por la Escuela Pública ha manifestado su apoyo a los estudiantes.
“Pensando que estos exámenes pueden definir el futuro de los estudiantes, no tiene sentido que actualmente se está decidiendo cómo será la prueba que se presentará en junio, en el mismo año que están cursando , con un profesorado y alumnado sin tener claro cómo enfocar su trabajo, con algunas asignaturas en las que nunca se había aplicado hasta ahora un enfoque competencial, ni han podido disponer de ejercicios o modelos que les sirvan de referencia”, explican en un comunicado de prensa.
Como explican los estudiantes: “Están jugando con la salud mental y el futuro de decenas de miles de estudiantes, añadiendo todavía más dificultades, más estrés y más incertidumbre a esta prueba”.
Se debería estar trabajando “en los exámenes de la PAU de 2026, no de 2025. Esa es la diferencia en hacer las cosas bien y pensar en el profesorado y en el alumnado por encima de todo lo demás”, finalizan.