inicio multimedia inicio foto El FC Barcelona logró una cómoda y brillante victoria (4-1) en el Camp Nou ante el Málaga, en un gran partido de los de Pep Guardiola, que con este triunfo, consiguen distanciar al Real Madrid en cuatro puntos y terminar la primera vuelta como líder en solitario de la clasificación, tras la disputa de uno de los partidos más destacados de la decimonovena jornada de la Liga BBVA.
El equipo catalán, consciente de la importancia del envite tras el pinchazo del Madrid en Almería (1-1), salió al terreno de juego con la intención de solventar rápidamente el compromiso a base de un nuevo despliegue de intensidad, presión, toque y verticalidad. El gran inicio de los locales se vio premiado rápidamente cuando en el minuto 7, Iniesta perforaba la meta de Asenjo tras realizar un gran disparo desde la frontal.
Los pupilos de Guardiola no bajaron el nivel en ningún momento ante un Málaga inoperante en ataque. En el minuto 17, Messi recogía el balón en la frontal y combinaba con Villa para que el asturiano marcara el segundo por bajo y allanara el camino de los blaugranas. El festival barcelonista no se frenó tras este tanto, pero Messi no estuvo acertado de cara puerta.
El 2-0 se antojaba corto teniendo en cuenta la exhibición ofrecida por el Barça hasta el momento. Para despejar cualquier duda que pudiera haber antes del descanso, Messi asistió con maestría a Iniesta, que se plantó sólo ante el meta visitante, que rechazó su disparo para dejar el balón a los pies de Pedro, que puso el tercero en el marcador, confirmando su excelente estado de forma y cerrando prácticamente el partido en el final del primer acto.
Tras la reanudación, el conjunto culé, sabedor de que el partido estaba ya en sus manos, bajó el ritmo y se dedicó a reservar esfuerzos y conservar su amplia ventaja. El descenso de la intensidad local permitió al Málaga adelantar sus líneas y acercarse con más frecuencia a la puerta de Valdés. Los andaluces, en el minuto 65 consiguieron acortar distancias por medio de un gran gol de falta de Duda, que obligaba a su rival a volver a engancharse al choque.
Los locales tomaron en cuenta el aviso de los malaguistas y aumentaron la velocidad de su juego, con lo que volvieron las ocasiones de gol . A quince minutos para el final, Xavi entregaba un gran balón a Villa que se quedaba sólo ante el meta blanquiazul para driblarle y marcar a placer. El cuarto tanto acababa con cualquier esperanza del Málaga y redondeaba un gran partido del cuadro barcelonés, que comanda con autoridad el campeonato liguero.