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El CRMF de Lardero reabre para asegurar el aislamiento de los asintomáticos

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A través de la Delegación del Gobierno, el Instituto de Mayores y Servicios Sociales (Imserso) ha puesto nuevamente a disposición de la Consejería de Salud el Centro de Recuperación de Personas con Discapacidad Física (CRMF) como una infraestructura que ayudará a contener la evolución del coronavirus en La Rioja.

Utilizado previamente como Centro Intermedio de Convalecencia, el CRMF de Lardero se despliega a partir de ahora como un dispositivo que garantiza el aislamiento de los casos que no puedan aislarse de manera efectiva en su domicilio.

La disponibilidad de este tipo de instalaciones era uno los requisitos solicitados por el Ministerio de Sanidad a todas las comunidades para pasar a la Fase 1 de desescalada, dentro del Plan de Transición hacia una Nueva Normalidad.

En concreto, estas instalaciones se convertirán en una residencia temporal para las personas que, siendo casos asintomáticos de la enfermedad, no puedan mantener el distanciamiento social en sus propios domicilios.

También alojará a los contactos estrechos de un caso confirmado que no puedan realizar el aislamiento domiciliario con seguridad hasta conocer el resultado de las pruebas de COVID-19. De este modo, se refuerza la interrupción de la cadena de transmisión en las fases iniciales de detección de casos e investigación epidemiológica.

Antes se utilizó como Centro Intermedio de Convalencencia

Desde el 21 de marzo y hasta el pasado 8 de mayo, un total de 64 pacientes pasaron por el Centro Intermedio de Convalecencia desplegado en el CRMF de Lardero, que tiene capacidad para un centenar de residentes. Su finalidad como Centro Intermedio de Convalecencia era garantizar el aislamiento de los pacientes que habían recibido el alta clínica por la enfermedad y no podían mantener con seguridad en sus domicilios la imprescindible cuarentena que completaba su curación.