El Parque Natural Sierra de Cebollera ha recibido la renovación del certificado Q de Calidad Turística que reconoce la buena gestión del turismo de naturaleza.
El consejero de Sostenibilidad y Transición Ecológica, Álex Dorado Nájera; el consejero de Desarrollo Autonómico, José Ángel Lacalzada; el director general de Biodiversidad, José Luis Rubio, y el director general de Turismo, Ramiro Gil, han asistido a la entrega de los Premios Q de Calidad Turística presididos por la ministra de Industria, Comercio y Turismo, Reyes Maroto, y el presidente del Instituto para la Calidad Turística Española (ICTE), Miguel Mirones.
Dorado Nájera ha afirmado que: “estamos muy agradecidos y orgullosos de renovar este sello que aporta prestigio, diferenciación y fiabilidad a un entorno natural privilegiado como es el Parque Natural Sierra de Cebollera y, por supuesto, contribuye a promocionar este entorno rico en biodiversidad para atraer turismo sostenible a La Rioja y que, a su vez, fomenta el desarrollo socioeconómico de la zona y la fijación de población en el territorio. Además, contamos con un centro de interpretación adaptado a las necesidades de personas con discapacidad visual”.
La marca de garantía Q Calidad Turística es una marca española que certifica, en este caso, la implantación de un sistema de gestión, en el Parque Natural Sierra de Cebollera y en su centro de interpretación, orientado al servicio del cliente y a la mejora continua. Este espacio riojano ha pasado unas estrictas auditorías que aseguran que la prestación de servicio es garantía de calidad, seguridad y profesionalidad, todo ello, para asegurar a los usuarios una buena experiencia turística.
Parque Natural Sierra de Cebollera
El Parque Natural Sierra de Cebollera es un enclave geológico privilegiado que pertenece a Red Natura 2000 y que destaca por sus valores ecológicos y paisajísticos. Tiene una extensión de 23.640 hectáreas que incluye los términos municipales de Villoslada de Cameros y Lumbreras, con las aldeas de San Andrés y El Horcajo, con una población conjunta próxima a los 500 habitantes.
Se trata de un paisaje que ha recuperado los bosques después de siglos de actividad intensa de la trashumancia en las tierras de Cameros. Una cultura tradicional que ha dejado su huella integrada en el nuevo paisaje a través de corrales, chozos pastoriles y las ermitas.
Además, este espacio natural protegido dispone de un centro de interpretación situado en Villoslada de Cameros que cuenta con una exposición permanente sobre las características más singulares y la biodiversidad del Parque Natural y organiza actividades relacionadas con el ocio y el turismo de naturaleza. Asimismo, el territorio cuenta con el Centro de Interpretación de la Trashumancia de Venta de Piqueras en Lumbreras.