La selección española de fútbol retorna a la acción (22.00 horas/La1) con su enfrentamiento clave ante la República Checa, correspondiente a la cuarta jornada del Grupo I de la fase de clasificación para la Eurocopa de 2012 de Polonia y Ucrania.
La campeona del mundo vuelve a la competición oficial casi medio año después de ganar con sufrimiento a Escocia en Glasgow (2-3) y con la intención de certificar en este choque y en el del próximo martes contra Lituania a domicilio su clasificación directa para defender su título el titulo logrado en 2008 en Austria y Suiza.
Los de Vicente del Bosque saben que, sobre todo, vencer a los checos sería un gran paso para este objetivo, ya que de salir airosos del largo viaje a Kaunas, dejaría al combinado nacional muy bien situado con tres partidos por jugarse, dos en casa (Liechtenstein y Escocia) y uno fuera (República Checa).
Para lograr esto, España necesita recuperar su mejor versión, aquella que se aleja de la ofrecida fundamentalmente en los partidos amistosos, con derrotas sonrojantes ante Argentina (4-1) y Portugal (4-0), y con una victoria por la mínima y al final ante Colombia en febrero en el Santiago Bernabéu.
Y es que el combinado nacional no ha acabado de rendir al máximo nivel desde su brillante actuación en el Mundial de Sudáfrica, aunque en esta fase de clasificación marcha con paso firme y está invicta con tres puntos de ventaja sobre los checos después de ganar a Liechtenstein (0-4), Lituania (3-1) y Escocia (2-3).
Ahora, en Los Nuevos Cármenes, la selección afrontará su primera gran prueba, ante el rival directo por el primer puesto, pero frente al que es claro favorito, más aún cuando los centroeuropeos no son aquel equipo lleno de talento y calidad de antaño.
Principalmente, España deberá mejorar la faceta defensiva, base de los triunfos en la Eurocopa y el Mundial, pero que últimamente no parece andar tan fina como antes, como quedó claro en Buenos Aires y Lisboa, e incluso en Madrid ante Colombia, que antes del 1-0 tuvo ocasiones claras.
Del Bosque no podrá contar con el líder de la zaga, el azulgrana Carles Puyol, que sigue lesionado, y romperá su pareja con su compañero Gerard Piqué. Todo hace indicar que será el madridista Sergio Ramos, que en esta campaña ya ha sido usado por José Mourinho como central, su nuevo compañero, con Álvaro Arbeloa y Joan Capdevila en los laterales.
En el centro del campo no habrá cambios, y el trío Xabi Alonso-Sergio Busquets-Xavi es inamovible, con especial mención para el de Terrassa, que, salvo sorpresa o contratiempo de última, se convertirá en 'centenario' con la selección. Andrés Iniesta también parece fijo y la duda es si el técnico salmantino optará por dos delanteros o por uno.
Si decide lo primero, y pese a su discreto momento, Fernando Torres será de la partida, lo que desplazará hacia la banda a David Villa, que espera acabar con su pelea con el gol y superar, por fin, a Raúl González como máximo goleador de la historia de la 'Roja'. Si opta por lo segundo, según lo visto en los entrenamientos, el de Fuenlabrada saldría del once y entraría Jesús Navas, dejando arriba únicamente al 'Guaje'.
LA REPÚBLICA CHECA PIENSA EN LA SEGUNDA PLAZA
Por su parte, la República Checa acude a Granada en busca de una sorpresa, que podría ser en forma de un empate, que no sería visto con malos ojos por el técnico Michel Bilek. Los checos, aunque advierten que nadie es invencible, saben que arañar un punto les ayudaría en su objetivo de acercarse a la segunda plaza.
El combinado centroeuropeo está en un proceso de renovación, en busca del talento y de la imagen futbolística que ofreció a finales de los 90 y principios del siglo XXI, con dos generaciones de buenos futbolistas que fueron subcampeones de Europa en 1996 y semifinalistas en 2004.
Pero ya no están los Pavel Nedved, Jan Koller, Karel Poborsky, Tomas Ujfalusi y Tomas Galasek, alguno de sus principales referentes, y en esa búsqueda de renovación, la República Checa ha perdido algo el paso e incluso ha cedido protagonismo a su 'vecina' Eslovaquia, que se clasificó por primera vez para un Mundial en Sudáfrica. De aquel gran equipo, a Bilek le quedan el portero Petr Cech, el centrocampista Tomas Rosicky y el delantero Milan Baros, pero ninguno de ellos tampoco tiene el esplendor de antaño.
El seleccionador checo ha incluido para esta convocatoria a dos caras nuevas como el delantero Libor Kozak, del Lazio, y el guardameta Tomas Vaclik, de la Segunda División del país, mientras que Baros retorna tras el revés en casa ante Lituania, que demostró que la República Checa no acaba de ser sólida y que, sobre todo, tiene problemas para hacer gol, anotando solo tres en otros tantos partidos.
España se ha enfrentado en dos ocasiones a este rival, en la fase de clasificación para el Mundial de Francia de 1998, con empate sin goles en Praga, con el sonado debut de Raúl González, y con victoria española 1-0 en Valladolid, con tanto de penalti de Fernando Hierro. Con la antigua Checoslovaquia, el balance fue de cuatro triunfos, un empate y siete derrotas.
FICHA TÉCNICA.
--POSIBLES ALINEACIONES.
ESPAÑA: Casillas; Arbeloa, Sergio Ramos, Piqué, Capdevila; Busquets, Xabi Alonso; Iniesta, Xavi, Villa; y Fernando Torres.
REPÚBLICA CHECA: Cech; Kladec, Hubnik, Hubschman, Pospech; Plasil, Polak, Rosicky, Pudil; Baros y Lafata.
--ÁRBITRO: Viktor Kassai (HUN).
--ESTADIO: Los Nuevos Cármenes.
--HORA: 22.00/La1.