La representante de Naciones Unidas para niños y conflictos armados, Radhika Coomaraswamy, ha lanzado un llamamiento a Estados Unidos y a Canadá para evitar que Omar Khadr, enjuiciado por la Comisión Militar de Guantánamo, sea condenado por un crimen de guerra presuntamente cometido cuando era menor de edad.
Khadr, de nacionalidad canadiense, se encuentra detenido en la prisión estadounidense de Guantánamo desde hace casi 8 años. Se le acusa de haber lanzado una granada en Irak que causó la muerte a un soldado estadounidense cuando tenía 15 años.
Coomaraswamy ha recordado que el estatuto de la Corte Penal Internacional (CPI) prohíbe juzgar a menores de 18 años por crímenes de guerra.
“Desde la Segunda Guerra Mundial ningún niño ha sido juzgado por un crimen de guerra, y los fiscales en otros tribunales internacionales han usado su discreción para no procesar a niños”, declaró la experta.
Además, según la representante de la ONU, los menores soldados deben ser tratados como víctimas y los procedimientos deben apuntar a su rehabilitación.
“El caso de Omar Khadr va a establecer un precedente que puede poner en peligro la situación de los niños soldados en todo el mundo”, advirtió Coomaraswamy.