El fiscal general de Estados Unidos, Eric Holder, aseguró este miércoles durante una rueda de prensa, que la adquisición por parte del Gobierno federal de una prisión en Illinois a la que trasladarán a presos del centro de detención de Guantánamo, en Cuba, contribuirá a cerrar estas controvertidas instalaciones posiblemente para el próximo verano.
Aunque el fiscal explicó que confiaba en que el cierre se produjese en cuestión de meses, en una entrevista posterior con Reuters admitió que la cancelación definitiva podría no llegar hasta verano o incluso otoño del próximo año.
El presidente norteamericano, Barack Obama, se comprometió al asumir el cargo a cerrar Guantánamo el próximo 22 de enero, pero hasta el propio mandatario ha reconocido que las autoridades no cumplirán el plazo. Fuentes de la administración aluden a problemas diplomáticos y políticos para el cierre del penal, donde aún permanecen 210 presos.
Holder anunció que visitará personalmente la prisión de Illinois para supervisar los trabajos de reforma que la convertirán en un centro más seguro, especialmente para albergar a individuos sospechosos de terrorismo. Los republicanos ya han expresado su malestar precisamente por el riesgo de seguridad que genera para Illinois el traslado de los presos.