El gasto en medicamentos de La Rioja está creciendo por encima del Índice de Precios al Consumo(IPC), y se lleva de hecho un 25 por ciento de la inversión pública en la partida de salud. Se calcula que alrededor de un 80% del gasto farmacéutico corresponde a prescripciones en la consulta del médico, y un 20% a consumo hospitalario. Este crecimiento interanual es similar al del resto de las Comunidades Autónomas, pero resulta “excesivo”, según reconoce el recién estrenado Plan de Salud de La Rioja.
El constante incremento del gasto en medicamentos es una preocupación constante de los Servicios Nacionales de Salud. Según el mencionado Plan de Salud de La Rioja, que dedica un apartado a este asunto, para el control de gasto farmacéutico se han utilizado “instrumentos básicos” como la congelación y sucesivas rebajas de los precios de los medicamentos, la modificación de los márgenes farmacéuticos, la potenciación de los medicamentos genéricos (más baratos) y la introducción de un sistema de precios de referencia que limita el reembolso que efectúa el sistema público.
Otras medidas que no están directamente relacionadas con los precios son los copagos del 100%, bien por la vía de su exclusión inicial de la financiación pública de ciertos tratamientos, bien mediante su retirada del catálogo de la prestación sanitaria del SNS, o incluso, del mercado.
GENÉRICOS
La prescripción de medicamentos genéricos puede suponer un ahorro considerable. La estimación de la Asociación Española de Fabricantes de Sustancias y Especialidades Farmacéuticas Genéricas (AESEG) indica que compara más genéricos puede reducir la factura de los sistemas sanitarios entre un 30 y un 50 por ciento. Sin embargo, el mercado de genéricos en España sólo representa el 7 por ciento del total.
A pesar de las medidas, el gasto sigue subiendo. Con una población cada vez mayor y con más enfermedades crónicas que requieren tratamiento de por vida, no parece que el número de recetas vaya a menguar, precisamente.
En respuesta a esta situación, han comenzado a aplicarse en los últimos años, políticas de uso racional de los medicamentos, las cuales parecen prometer, en principio, contribuir de forma eficaz a la contención del gasto farmacéutico. Estas podrían explicar que el crecimiento interanual del gasto farmacéutico en La Rioja haya pasado de un 12,30% en 2002, a un 6,05% en 2007. La recientemente creada Comisión de Farmacia del Área de Salud de La Rioja, tendrá que coordinar e impulsar la utilización correcta de los medicamentos para contribuir a la sostenibilidad del sistema público de salud de la comunidad.
PREVISIONES
Un reciente análisis divulgado por el semanario especializado 'El Global' indica que un mínimo de 11 comunidades autónomas agotarán su presupuesto de farmacia antes de fin de año, La Rioja entre ellas. En esta comunidad un ritmo de crecimiento de sólo el 3 por ciento bastará para consumir ese presupuesto antes de cerrar el ejercicio, una previsión 'optimista' teniendo en cuenta que ese índice es algo superior al 6 por ciento a fecha de hoy.
Según este modelo, si el crecimiento de la factura a lo largo de este año fuera cero, algo prácticamente imposible, La Rioja podría hacer frente al gasto en medicamentos. Sólo Extremadura, el País Vasco, Ceuta y Melilla se librarían del déficit, ya que “habrían destinado a su prestación farmacéutica un presupuesto suficiente, con independencia de cuánto crezca el gasto”.
Julián Zabala, responsable de comunicación de Farmaindustria, recordaba en un reciente encuentro con los medios que España es, junto a Grecia, el país que tiene los precios de los medicamentos más bajos. Sin embargo, señaló que “nuestra cobertura de servicio es mejor” que la de los “países de nuestro entorno”.