Hoy jueves, la consejera de Agricultura, Ganadería, Mundo Rural y Medio Ambiente, Noemí Manzanos junto con María Gloria Sáenz, dinamizadora del primer plan estratégico de la producción ecológica de La Rioja y Jose María Villar, capataz de la finca, han realizado una visita a la explotación ganadera propiedad del Gobierno de La Rioja en “una zona privilegiada a los pies de la Sierra de la Demanda, en Pazuengos”.
El proceso que ha culminado con este reconocimiento se enmarca dentro del I Plan Estratégico de la Producción Ecológica de La Rioja, que presenta un plan de acción con 41 medidas para incrementar el rendimiento de distintas explotaciones.
La finca en la que se encuentra el ganado consta de unas 1700 hectáreas dedicadas a pastos y siembras de forrajes para dar de comer al ganado. Según ha dicho la consejera, “contamos con cerca de 300 vacas, aproximadamente la mitad son madres; cuatro toros, dos de ellos, puros y dos pues de cruce; y luego pues el resto entre terneros y terneras la mitad son para carne”, ganado que sería “la primera ganadería bovina en ecológico de La Rioja”. “Es un reto que asumió la Consejería y que a día de hoy ya es una realidad”.
Tener el título de ganadería bovina en ecológico significa tener, según ha contado Noemí, la “certificación de ecológico tanto de los pastos y del ganado, como de las producciones de forrajes y de piensos que hacemos también desde las demás fincas propiedad del Gobierno de La Rioja, como son Valdegón y La Grajera”.
“Intentar dotar de valor de valor agronómico a esta ganadería con la calificación de enoecológica es algo que tenemos que resaltar, que tenemos que agradecer y que tenemos que continuar trabajando”, ha dicho la Consejera.
Uno de los objetivos que tiene el Gobierno de la Rioja es intentar expandir el modelo ecológico de ganadería a otros ganaderos. La producción ecológica se basa en un reglamento europeo que establece una serie de normas de cómo tiene que ser la producción, el manejo, la alimentación de estos animales, y fue a partir del 13 de mayo de este mismo año cuando la explotación de Pazuengos pasó a calificarse como 'explotación en ecológico'.
Según ha comunicado María Gloria Sáenz, este ganado aspira a ser un “ejemplo de una forma de cría respetuosa con las razas autóctonas de la Comunidad Autónoma, en base también a una alimentación producida en nuestra comunidad dentro de esos parámetros de la producción ecológica, amparada y certificada”. “Ir un poco de abanderados y abrir camino a los que tienen que ir después”.
También ha añadido que, en este plan que está vigente de este 2023 hasta el año 2026, algo “que se tiene muy claro”, es que “se quiere aumentar es el porcentaje de gente que, no solamente den ese primer paso, sino que luego sean capaces de mantenerse porque sean rentables económicamente”.
Por su parte, José María Villar, el capataz de la finca donde se encuentra el ganado, confesaba que “está resultando un poco complicado adaptarnos a la ecología, pero yo creo que lo vamos a conseguir pronto”. Afirma que lo complicado que tiene este tipo de ganadería ecológiga en extensivo para el ganadero es reducir los insumos de trigo “a la mínima expresión” y mantener la misma calidad de carne.