Si Tunde y Birgander, 17 minutos entre ambos -por muy lastrados que estén-, no miran a canasta y sólo cogen un rebote; si Bonifant -18 minutos en pista- lanza una vez; si Martín apenas vale para dar ligeros descansos a Garrido; si Pressley juega (10 minutos) cuando 48 horas antes había sido operado de la nariz -pese al mérito que tiene- se puede entender que el Calzados Robusta no ofrezca su mejor versión por momentos. Da igual que Kupsas acapare la atención, que firme 31 puntos, y que esté secundado por Garrido, Bravo -saliendo como titular- Norris -últimamente ayudando a los suyos cando peor están las cosas- y Galarreta, todos ellos por encima de la decena de puntos. Insuficiente para acercarse a la salvación. Sólo da para ceder por 100 a 89 ante un San Pablo Inmobiliaria Burgos que pelea por otras metas.
Cuando de partida un equipo endosa un 9-0 en un visto y no visto es que algo falla, que las premisas iniciales o no han sido bien realizadas o no se han ejecutado como debían. Un parcial que lastra, que obliga a ir contracorriente, que determina que la ambición y la agresividad -ganas en una palabra- por las que se bloquearon ante Magia Huesca volvían a ser superiores en un rival, cierto es, que juega en otra liga, que pelea por el liderato de LEB Oro. Es decir, vuelta a las andadas cuando el agua empieza a superar el cuello, cuando la capacidad que tiene para respirar este paciente es mínima, cuando se exige hacer pleno de victorias en las tres jornadas que restan y esperar acontecimientos. Es lo único que le queda a este Clavijo que parece una sombra de lo que fue en el pasado.
Ese juego ofensivo alegre, marcado por la supuesta creatividad en ataque de un bloque con variedad de recursos se ha convertido en un equipo que reacciona cuando para alcanzar el triunfo tiene que hacer la hombrada, cuando el partido ya está imposible de darle la vuelta. En ese momento, aprieta, muestras pinceladas de equipo que puede, quiere y sabe competir independientemente del oponente. El problema es que es muy tarde para arreglar lo hecho previamente. Por eso, el duelo ante Burgos podría decirse que fue como el devenir de la actual temporada.
El 0-7 con el que arrancó la liga se puede entender con el 31-19 al final del primer cuarto o incluso con el 46-26 que se llegó a registrar antes del descanso. Entonces, viendo las orejas al lobo, Antonio Pérez pide un tiempo muerto -se logra la primera victoria ante Marín- y el Calzados Robusta recupera el ánimo, la confianza. Se acerca al descanso, 50-40, ofreciendo buenas sensaciones pese a la sangría de puntos encajado. Durante el tercer parcial asusta metiéndose dentro de esa barrera psicológica de los 10 puntos -las victorias que va logrando le dan para salir del descenso- con el 66-58.
Se lo cree, genera dudas a su contrincante -ofrece resistencia y convive entrando y saliendo del pozo- y en el toma y daca constante con Burgos aún insiste en no marcharse del partido y pelear por él gracias al 66-60. Los locales parecían encogidos y la fluidez inicial había dado paso a los nervios. Por su parte, el Clavijo, lanzado, quiere aguar a los anfitriones. Sin embargo, el físico y los recambios no ayudaron a dar continuidad a la remontada imposible. Además, Toncinic, con dos triples consecutivos, volvió a aumentar la renta, 86-74, aunque Galarreta, merced a 8 puntos seguidos, recuperaban el aliento para ajustar al 88-82. Hasta ahí llegó el Calzados Robusta. Hasta que la superioridad en el rebote de los locales, 33 frente a 25 y sólo 4 rebotes ofensivos de los riojanos -así es difícil gozar de segundas oportunidades- destacó ante los fallos visitantes.
De esa manera se culminó con el 100-89 final. Un marcador que no engaña, que determina que un equipo que quiere salvarse tiene que, una vez más, apretar en defensa, recuperar la solidez en su pista, olvidarse de las cosas raras y centrarse en defender -como en varias ocasiones ha indicado Antonio Pérez- las acciones básicas del baloncesto. Sólo así se podrá contar con alguna posibilidad de éxito en estas tres jornadas que faltan para acabar la competición. Tres finales, dos en el Palacio, que hay que ganar para mantener la esperanza de conservar la categoría. El filial del Barcelona con su triunfo ante Palencia ya queda a dos triunfos, como están a hora Prat -un partido menos- y Magia Huesca -pendiende su duelo de esta jornada-, gracias a su mejor . Los palentinos serán ya el domingo 16 de abril por la tarde el próximo en visitar el feudo de los logroñeses. No valen excusas.
FICHA TÉCNICA
San Pablo Inmobiliaria Burgos: Brine (2), Steinarsson (11), Javi Vega (12), Huskic (20) y Álex López (7), cinco inicial, Mo Soluade (4), Álex Barrera (15), Jorge García (9), Edu Martínez (7) y Toncinic (13).
Calzados Robusta: Garrido (16), Bravo (12), Galarreta (12), Bonifant (2) y Kupsas (31), cinco inicial, Presley, Martín (3), Birgander, Tunde y Norris (13).
Parciales: 31-19 19-21 (50-40 al descanso), 25-25 (75-65) y 25-24 (100-89 al final).
Árbitros: Morales García-Alcaide y Muñoz García. Eliminado por faltas personales el visitante Norris.