La conversión en peatonal que va a ser clave para esta zona céntrica de Logroño no está siendo demasiado placentera para los empresarios hosteleros de la zona. El principal problema reside en los plazos, la obra iba a empezar tras las fiestas de San Mateo del año pasado, pero finalmente fue a finales de noviembre cuando empezaron a verse las grúas y taladros en la zona.
La intervención contempla un gasto total de 2,4 millones de euros. El proyecto arranca en el cruce de Bretón con Víctor Pradera y abarca también la calle Siervas de Jesús (que da salida a Avenida Portugal), para una superficie total de 5.878 metros cuadrados. La reforma será integral y dibuja una calle peatonal que suprime por completo el tráfico rodado, un ambiente cultural, turístico y gastronómico del corazón de Logroño.
Como características concretas, está prevista la sustitución de colectores, diferenciación del pavimento y la colocación de 78 puntos de luz a través de nuevas luminarias. También se harán las instalaciones necesarias para un sistema de recogida neumática de residuos que entrará en funcionamiento en el futuro; y para la también futura implantación del sistema de vigilancia de matrículas de vehículos.
Pero la obra no está siendo precisamente tranquila e impiden ver el final del túnel a los que la padece. Primero el temporal de lluvia y nieve de diciembre, los hallazgo arqueológicos encontrados en enero, apagones, averías y cortes de agua han retrasado y generado molestias en su entorno. Pero esta misma semana el Ayuntamiento de Logroño ha indicado que el fin de semana anterior a San Bernabé, el 5 de junio, el terreno estará listo para que el sector hostelero de la zona de la Calle Bretón de los Herreros, Once de Junio y Siervas de Jesús despliegue sus terrazas. Además los hosteleros de esta zona únicamente pagarán medio año, de julio a diciembre, de la liquidación del padrón fiscal correspondiente a 2010, por todas las molestias y pérdidas de las obras.SIN TASAS, POR FAVOR
Y los que han padecido en primera personas estas molestias han sido los hosteleros de la zona, que ya calculan pérdidas de ingresos de hasta el 50 por ciento. Ofrecen a este medio su punto de vista sobre la apertura de las terrazas antes de las fiestas patronales, su postura sobre el pago reducido de la tasa o las incidencias que están padeciendo con las obras de la calle. La opinión del encargado de Café 13, Diego, es muy representativa puesto que considera que las obras deberían haber empezado con antelación, por lo menos de dos meses, para evitar los problemas derivados de los retrasos y los propios de las obras en esta época del año. Denuncia molestias como la ocurrida en la última semana que han estado sin alumbrado público puesto que un cambio de farolas de un día, se ha prolongado a semana y media sin luz. Aunque se muestra positivo con la ordenanza de terrazas que exige que en el plazo de un año éstas simulen a madera en sus materiales y esté coloreadas en tonos beige o amarillos discretos, también se muestran satisfechos con la futura remodelación.
Por su parte, otro de los hosteleros de la zona, Gerardo, el encargado de Café Berlín, asegura que no cree que la temporada de terrazas abra para el 5 de junio. Considera que esta fecha está al caer y que es muy probable que no de tiempo a terminar la obra. Asegura que en la actualidad únicamente está el centro de la calle Bretón de los Herreros desde la Calle del Laurel hasta hasta el Juzgado. También apunta que las obras les está afectando negativamente puesto que muchos clientes han tenido que acceder a los establecimientos entre escombros, barro, vallas que cortaban el acceso a los establecimientos.... Considera que el Consistorio logroñés no ha tenido mucho cuidado al indicar los cortes de agua, ya que en muchas ocasiones han indicado que se trataba de 'averías'. A pesar del lado amargo de las obras también ve con muy buenos ojos la futura peatonalización y apunta que hasta que no se normalicen los nuevos accesos y vuelva la normalidad a la zona no deberían pagar ninguna tasa. Por lo que aboga esperar a pagar cuando todo esté a pleno rendimiento. “Vamos a ver en los próximos 6 meses como va esto” sentencia.
Por su parte el encargado de Café Bretón, José, afirma esperanzado que “esperamos que para San Bernabé podamos poner las terrazas (...) porque ahora se van a duplicar cuadrillas para poner adoquines de la calle y se van a trabajar sábado y domingos” afirma. Aunque cree que a pesar del esfuerzo tal vez sea el 8 de junio, el mismo día que arrancan las fiestas de San Bernabé, cuando empiece la temporada. Este hostelero “ve lógico” que únicamente paguen el medio año de tasas que van a utilizar y añade que “podían haber hecho el favor de no habernos obligado a pagar ningún tipo de tasas, en compensación por los meses que hemos tenido que estar sufriendo, pero parece ser que legalmente eso no es posible”.
Unos y otros esperan compensar en la temporada de terrazas de verano las pérdidas económicas de los últimos seis meses, y aunque denuncian en muchos casos los inconvenientes que están padeciendo con estas obras... esperan optimistas recuperar el tiempo perdido a partir de julio.