La alcaldesa de Logroño y vicepresidenta de la Federación Española de Municipios y Provincias, Cuca Gamarra, ha participado en las últimas horas en la Junta de Gobierno y en el Consejo Territorial de este organismo; reuniones en las que se ha vuelto a abordar la reforma del impuesto de plusvalías como uno de los asuntos que más urgen a las entidades locales.
De hecho, Gamarra apuesta por cerrar ya una propuesta que “ofrezca seguridad jurídica y venga a frenar la incertidumbre en la que los ayuntamientos nos encontramos a la hora de aplicar este impuesto, acrecentada tras la sentencia del Tribunal Constitucional que falló en contra de cómo lo estábamos calculando”.
En el seno de la FEMP se está ultimando una propuesta con la que llegar a un acuerdo con el Gobierno Central; un acuerdo que Cuca Gamarra ve próximo porque ya se lleva tiempo trabajando sobre él. De hecho, ella calcula que se podría lograr el consenso antes de que finalice este año.
Sería no obstante una fórmula “transitoria, ya que siempre hemos dicho que el nuevo impuesto debe venir de la mano de la reforma de la financiación local, y que ésta debe acometerse en paralelo y simultáneamente a la reforma de la financiación autonómica”.
En este importante reto que para el municipalismo supone dotarse de un nuevo marco de financiación, para la alcaldesa de Logroño es fundamental “ahondar en la segunda descentralización para que los ayuntamientos participen de los ingresos de las Comunidades Autónomas y dispongan de financiación suficiente para las competencias que realmente están desempeñando”.