Los avances de los rebeldes en Libia sólo consiguen llegar a buen puerto con la ayuda de los 28 países aliados que se han desplazado como fuerza aliada hasta Libia.
La Casa Blanca conoce esta situación y ante los repligues constantes de la población sublevada en Libia está planteándose ofrecer algún tipo de ayuda o soporte para las fuerzas rebeldes. Una de estas opciones pasa por “equipos de comunicación, transporte y suministro médicos”. De hecho, es una de de las mayores prioridades de la población libia.
En todo caso, en estas declaraciones hechas públicas por Obama en una entrevista a la NBC, dejó entrever que EEUU y el resto de países buscan en estos momentos una salida claramente pacífica para Libia, una transición que no sea traumática para ninguno de los bandos.
Además el presiente Obama está convencido de que “se ha debilitado” a Muamar Gadafi hasta el punto de que “con los ataques de la coalición y las sanciones internacionales” se conseguirá que abandone el poder. La cuestiónes es cuándo y cómo, una pregunta para la que los aliados, de momento, no tienen respuesta a pesar de que Gadafi “ha perdido el control de la mayor parte del país”.
Obama aclaró también en esta misma entrevista que lo sucedido en Libia no va a ser dogma de su Administración, es decir, Washington no quiere hacer “uso de la fuerza militar en todas partes” para imponer otra forma de Gobierno.