Para poder ver las Perseidas solo hay alejarse tanto como sea posible de las luces de las grandes ciudades porque ahogan el brillo del cielo y mirar en dirección nordeste, por encima del ecuador. Los días óptimos para poder observar la lluvia de estrellas son este viernes y sábado y se preve que se puedan ver entre 100 y 150 meteoritos por hora. Sin embargo, también se podrá ver alguna estrella desde hoy hasta el 16 de agosto.
Según indica El País, la Tierra cruzará por el mismo sitio que pasó el cometa Swift-Tuttle en 1992. El paso del satélite dejó tras de sí una estela de polvo y pequeñas piedras que se convertirán en estrellas fugaces cuando choquen contra la atmósfera terrestre. Los restos del cometa, entrarán en la atmósfera a 160.000 kilómetros por hora, calentándose por la fricción hasta alcanzar los miles de grados de temperatura y ponerse incandescente.
La lluvia de estrellas, también conocida como Perseidas, recibe su nombre porque parece que surgen del lugar que ocupa la constelación de Perseo. En la Europa medieval también se las empezó a conocer como lágrimas de San Lorenzo, un mártir que según la tradición murió asado en una parrilla.