Salgado entrega los Presupuestos Generales del Estado 2011

Rioja2

0

La vicepresidenta segunda y ministra de Economía y Hacienda, Elena Salgado, ha asegurado que las cuentas del Estado para el año que viene “son realistas” y van a marcar “una diferencia”, porque se convertirán ser los Presupuestos que ayudarán a que el país crezca a un ritmo del 1,3% en 2011.

En rueda de prensa tras entregar los Presupuestos en el Congreso, Salgado ha dicho que las cuentas son “austeras”, favorecen la cohesión social y dan un impulso a la actividad económica porque inspiran confianza, “el elemento más importante para la recuperación”.

A su parecer, los Presupuestos están marcados por la necesaria reducción del déficit y la mejora de la competencia, ya que el cumplimiento de los compromisos adquiridos con Bruselas y en el exterior son la única manera de proteger al país de la situación de los mercados financieros, que aún es “volátil” y cuenta con ciertos elementos de “inestabilidad”.

Además, ha dicho que las cuentas demuestran que el Gobierno mantendrá su política en el futuro con más austeridad, reformas y manteniendo el objetivo prioritario de reducir el déficit. “Los resultados indican que estamos en el camino correcto y en ese camino vamos a seguir”, ha indicado.

A su parecer, los Presupuestos son austeros porque desarrollan las medidas de ajuste planteadas, pero también optimizan la eficiencia en el uso de los recursos públicos para contribuir a la recuperación de la economía española.

Así, ha resaltado las previsiones en materia de ingresos, unas cifras “prudentes” que se podrán cumplir a final de año, tal y como está ocurriendo en 2010. En el gasto, se mantienen las prioridades del Ejecutivo, aunque, en esta ocasión, se han tenido que examinar las partidas con “especial atención”.

Así, los Presupuestos incluyen, según Salgado, un “fuerte ajuste” del gasto público motivado por la estrategia austeridad del Gobierno, y contemplan, entre otras cosas, la congelación de las retribuciones del personal al servicio de la Administración, consolidando la rebaja media del 5% puesto en práctica en junio y la restricción de la oferta de empleo público.

Con la estrategia de austeridad, el Ejecutivo pretende reducir el desequilibrio de las cuentas públicas en 20.000 millones, para lo que también ha incluido en los Presupuestos uns disminución media del 15,6% en los créditos disponibles por parte de los ministerios, que deberán recortar partidas y capítulos y reducir en un 6,7% los gastos de funcionamiento de la Administración.

MÁS DE LA MITAD DEL GASTO ES SOCIAL.

A pesar de la austeridad, los Presupuestos no reducen los recursos destinados al gasto social, que crecen un 1,3%, hasta los 183.231 millones, lo que supone el 58% del presupuesto total. Además, el Gobierno mantiene su compromiso de garantizar el nivel de cobertura de las prestaciones por desempleo, así como de dotar al Fondo de Reserva de las pensiones, que recibirá 3.457 millones adicionales.

Entre las partidas que no se ven afectadas por los recortes generalizados destacan las becas, que crecen un 2,6% y las pensiones mínimas, que aumentan un 1%. En cambio, las actuaciones destinadas a I+D bajan un 1,6% y el esfuerzo inversor cae un 29,6%. “Vamos a gastar menos, pero vamos a reducir el gasto de manera muy selectiva”, ha asegurado la ministra.

En cuanto a los ingresos, alcanzarán los 178.917 millones, un 5,7% más, aunque excluidas las cesiones a los entes territoriales se quedarán en 106.020 millones. Los ingresos tributarios crecerán un 6,1% en términos homogéneos, hasta los 164.932 millones, gracias al impulso de la recuperación económica y a los últimos cambios normativos.

CAMBIOS FISCALES.

Aún así, las nuevas medidas fiscales incluidas (los dos nuevos tramos del IRPF y cambio de tributación en las SICAV) apenas tendrán efecto en la recaudación. De hecho, Salgado repasó los cambios normativos, pero no quiso hacer una previsión de lo que crecerá la presión fiscal por estas medidas. Lo que sí adelantó es que la presión alcanzó su mínimo en el año 2009, cuando se situó en el 30,3% más o menos, que ha crecido alrededor de un punto este año y que se incrementará un poco en 2011.

La ministra ha asegurado que el Gobierno se siente “absolutamente cómodo” con estas previsiones y que no hay ningún “plan B” previsto por si no se llegan a cumplir, ya que en 2011 previsiblemente ocurrirá lo mismo que en 2010: que la liquidación será superior a lo presupuestado.

Preguntada por la posibilidad de que se adopten nuevas medidas fiscales durante la tramitación parlamentaria de las cuentas, la vicepresidenta segunda ha confiado en que los Presupuestos que salgan del Congreso sean similares a los que ha presentado el Gobierno, aunque ha recordado que depende de los grupos parlamentarios y de cómo quieran usar el pequeño margen que existe para la negociación.

¿MÁS SUBIDAS DE IMPUESTOS?.

Sobre un posible incremento de las rentas de capital, ha insistido en que la postura del Gobierno es que “no es el momento” para llevar a cabo un cambio de este tipo. En cuanto a la línea ICO de créditos directos para ayuntamientos que se canceló, Salgado ha dicho que se pondrá en marcha cuando se encuentre una vía que permita hacerse sin incrementar tres décimas el déficit público. “Aún no la hemos encontrado”, ha admitido.

Según la 'número tres' del Ejecutivo, los Presupuestos avanzan en la reducción del déficit porque reducen el gasto y aumentan los ingresos evitando incrementar de manera “significativa” la presión fiscal, a pesar de que introducen pequeños cambios normativos para mejorar la equidad. Además, ha recordado que los mayores esfuerzos los hará el Estado, que es el que asume la mayor parte del ajuste.

De esta forma, Salgado ha considerado que las cuentas de 2011 permitirán al país cumplir con el mandato de Bruselas, que obliga a reducir el déficit al 6% el año que viene y al 3% en 2013.

PRIMEROS PGE TRAS DOS AÑOS DE RECESIÓN.

La ministra ha destacado el contexto en el que se presentan los Presupuestos, justo cuando el país acaba de dejar atrás dos años de recesión y cuando se está recuperando la confianza en la economía española gracias, en parte, a la adopción de medidas “duras” de ajuste y al inicio de un conjunto ambicioso de reformas.

Además, ha repasado las cifras el que se basan los Presupuestos al defender una vez más el cuadro macroeconómico del Ejecutivo, aunque ha admitido que en las últimas semanas se han hecho algunos ajustes en el cuadro sin modificar las cifras principales, que apuntan a una caída del PIB del 0,3% en 2010 y un crecimiento del 1,3% en 2011. En materia de empleo sí ha habido ajustes en las previsiones del Gobierno porque la población activa ha crecido más de lo previsto en el tercer trimestre.

En cuanto a la negociación parlamentaria, Salgado ha recordado que el Gobierno está obligado a buscar el máximo apoyo posible al texto para sacarlo adelante, aunque se ha mostrado absolutamente confiada en las posibilidades del Ejecutivo para dar 'luz verde' al texto. Aún así, ha recordado cualquier propuesta de los grupos que desvíe el nivel de gasto marcado tendrá que ser compensada.