Especialistas del Centro Alemán de Investigación de Cáncer, en Heidelberg, afirman que los tatuajes podrían ser una forma mucho más eficaz de vacunar a la gente, con mejor respuesta inmunológica que con las vacunas intramusculares.
“La vacuna de tatuajes sería además una forma menos costosa de llevar inoculaciones a los países más pobres del mundo” según Ivonne Rubio, una de las autoras del estudio.
La investigación llevada a cabo con ratones, utilizó una proteína del virus de papiloma humano (el VPH que causa cáncer de cuello uterino) para el modelo de la vacuna de tatuaje, y se comparó su eficacia con la de la inyección normal, que es intramuscular.
Según sus resultados, tres dosis de una vacuna de tatuaje producen 16 veces más anticuerpos que tres inyecciones intramusculares.