El vídeo grabado por Marc Garmirian, uno de los periodistas franceses liberados tras permanecer más de una semana detenidos en Chad por su relación con el presunto secuestro de menores organizado por la ONG Arca de Zoé, pone en cuestión que la organización francesa hubiera identificado adecuadamente a algunos de los 103 niños que trataban de sacar de Chad para entregarlos en acogida a familias francesas.
El vídeo, emitido en un documental de la televisión francesa Métropole 6, muestra a una de las cooperantes rellenando fichas de niños que eran entregados por líderes tribales en el centro que tenía abierto la ONG en la región fronteriza entre Chad y Sudán. La cooperante no pide a los adultos que entregan al niño referencias sobre el menor ni documentación alguna.
Al ser preguntada sobre si podría equivocarse en cuestiones básicas como la nacionalidad -chadiana o sudanesa- de los menores o si son o no huérfanos, la cooperante reconoce que sí podría.
En otros fragmentos de la grabación de Garmirian aparecen cooperantes vendando las cabezas y extremidades de los menores y empapando algunas de las gasas con yodo para que, según uno de los cooperantes, parezcan “heridos de guerra”. Garmirian trabaja para la agencia francesa de noticias Capa Presse, con sede en París.