Alejandra Jacinto (Madrid, 1989) ha tenido una carrera acelerada en la política madrileña. Pasó de ser la representante legal y cara visible de la Plataforma de Afectados por la Hipoteca (PAH) en Madrid durante diez años a dar el salto a la política institucional como candidata en las elecciones autonómicas del 4 de mayo de 2021 por Unidas Podemos en la lista que encabezó el exvicepresidente del Gobierno Pablo Iglesias. Desde entonces, su ascenso no ha parado y Jacinto ha logrado consolidarse como la líder del espacio en la región, hasta el punto de convertirse en la cabeza de cartel de la candidatura con la que Podemos e Izquierda Unida aspiran llegar hasta la Puerta del Sol.
Hace apenas unos días, ambas formaciones anunciaban un acuerdo para concurrir de forma conjunta en Madrid en las autonómicas y municipales de mayo. A diferencia de otras ocasiones, el pacto se ha sellado a meses de los comicios, una cuestión que Jacinto celebra porque permitirá, defiende, “generar un proceso de confluencia social” donde se incorporen “todos los sectores de la sociedad civil”. Jacinto toma con prudencia la última encuesta del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS), que indica que la izquierda podría arrebatar el Gobierno a Isabel Díaz Ayuso, aunque sí cree que existe un caldo de cultivo para que eso suceda. Sobre si Unidas Podemos –o como termine llamándose la coalición– debe formar parte de un hipotético gobierno de izquierdas en la región, Jacinto no tiene dudas: “Que Podemos esté en el Gobierno de la Comunidad de Madrid es la única garantía de que se hagan políticas transformadoras”.
Desde Podemos e Izquierda Unida anunciaban hace unos días un acuerdo para concurrir de forma conjunta a las elecciones de mayo. ¿Hay más detalles de en qué va a consistir esta coalición?
Es un paso necesario y estoy muy contenta de que hayamos cerrado ese acuerdo y lo hayamos hecho con tiempo para que las bases de las dos organizaciones puedan ratificarlo. Más allá de esa voluntad de concurrir juntas en coalición a las elecciones, hace falta que hablemos y que nos centremos en los contenidos de la propuesta política, que es lo más importante. Me da un poco igual la cuestión del reparto de las listas, me interesa más cuál es el proyecto de Podemos y de Izquierda Unida para la Comunidad de Madrid. Creo que debe ser el de generar un proceso de confluencia social donde incorporemos a todos los sectores de la sociedad civil como los taxistas, los afectados [por las obras del metro] de San Fernando [de Henares], las madres y los padres que pelean por entornos escolares seguros, los vecinos y vecinas de la Cañada Real, toda la gente que defiende el derecho a la vivienda, los sindicatos, las asociaciones vecinales... Entre todos debemos construir esa alternativa.
Una de las dudas es la marca con la que concurrirán a los comicios. ¿Tienen ya nombre para la candidatura?
Todavía no.
Encabezará esa lista, ¿por qué quiere ser presidenta de la Comunidad de Madrid?
La Comunidad de Madrid necesita un cambio: que pase de ser un paraíso fiscal a un paraíso social donde se garanticen los derechos sociales. Los ciudadanos que vivimos en la Comunidad de Madrid tenemos unos derechos a la intemperie, unos derechos solo al alcance de los que se los pueden pagar. Madrid necesita ese cambio y por eso me postulo a presidenta de la Comunidad de Madrid.
¿Qué es lo más urgente que necesita la Comunidad de Madrid?
Hay cuestiones de emergencia social y humanitaria, como devolver la luz a la Cañada Real, que es imperioso. Miles de familias y niños se enfrentan al tercer invierno sin luz. Es urgente también solucionar la situación de los afectados por las obras de la línea 7B del Metro en San Fernando de Henares. Son cuestiones acuciantes que hay que solucionar de forma inmediata. Evidentemente, devolver y garantizar los servicios públicos como la sanidad, la educación y la vivienda. Todos ellos son ejes fundamentales.
Usted dio el salto a la política institucional en las últimas elecciones regionales. Pablo Iglesias lideró esa candidatura para, entre otras cuestiones, evitar que Unidas Podemos se quedase sin representación en la Asamblea de Madrid, como pronosticaban las encuestas. ¿Cree que puede mejorar el resultado de Iglesias?
Desde luego tengo la voluntad y la pretensión de hacerlo, y en ello me estoy dejando la piel incluso a costa de no ver a mi hija muchos días. Sí que creo que las elecciones del pasado 4 de mayo se produjeron en un contexto muy concreto, una situación muy particular determinada por la pandemia y en un momento en el que Ayuso no había legislado nada, no había aprobado ninguna ley, solo la del Suelo, que luego recurrimos nosotros al Tribunal Constitucional. Ahora, tras casi dos años, los madrileños y madrileñas estamos padeciendo sus políticas y puede cambiar la situación. Nosotros podemos mejorar los resultados y tengo además claro que Unidas Podemos es una fuerza determinante para que se pueda producir el cambio en la Comunidad de Madrid.
El jueves, el CIS publicó una encuesta que pronosticaba que podría haber un gobierno de izquierdas en Madrid. ¿Cree que eso es posible?
Siempre soy prudente con las encuestas, pero lo que refleja la del CIS es que hay un hartazgo hacia las políticas de Isabel Díaz Ayuso. De hecho, es la presidenta peor valorada en relación al resto de presidentes autonómicos. La valoración de su gestión es muy mala por parte de los madrileños y eso tiene que ver con que llevan este último año y medio, que es cuando a Isabel Díaz Ayuso le ha dado por legislar, padeciendo sus políticas. El desmantelamiento de los servicios públicos como plan absolutamente manifiesto y decidido con acabar con la Atención Primaria y con el servicio sanitario de salud, viene a reflejar ese hartazgo. La encuesta muestra además que hay partido y que un bloque progresista puede arrebatarle el Gobierno a Ayuso.
Si ese escenario se cumple y los votos de Unidas Podemos son necesarios para gobernar, ¿pedirán estar en el Gobierno?
Que Podemos esté en el Gobierno de la Comunidad de Madrid es la única garantía de que se hagan políticas verdaderamente transformadoras. Pensamos que se puede dar ese cambio y que deberíamos todas las fuerzas progresistas ponernos de acuerdo para poner en marcha ese gobierno de transformación, también de levantar alfombras. No hay que olvidar que uno de los principales problemas y amenazas que tiene la Comunidad de Madrid es la corrupción sistemática.
Por lo que ha manifestado Más Madrid, y tras el acuerdo de Podemos con IU, parece que no habrá lista unitaria a la izquierda del PSOE en los comicios de mayo. ¿Teme que la división de la izquierda pueda evitar ese cambio? En el imaginario colectivo de la izquierda están las elecciones de 2015, cuando la candidatura de IU se quedó por debajo del 5% de los votos.
Nuestra postura es conocida, la hemos reiterado en numerosas ocasiones. Siempre hemos pensado que sería deseable una única candidatura de coalición progresista a la izquierda del PSOE de las fuerzas del cambio. Pero también creo que lo importante es movilizar e incorporar al proyecto de cambio a todos esos actores de la sociedad civil organizada que son los que con su fuerza nos demuestran que hay posibilidades de cambio. Creo que el mejor ejemplo es la manifestación del pasado 13 de noviembre [contra la gestión sanitaria de Ayuso], que fue una evidencia de la fuerza de Madrid.
Una vez se confirma que habrá tres listas de izquierdas en los comicios, ¿qué diría que diferencia a Unidas Podemos de Más Madrid?
A mí no me gusta hablar de otras fuerzas políticas, pero lo que sí puedo decir es que nosotros somos una fuerza de gobierno. Ninguna persona progresista se conforma con ser oposición, ninguna fuerza política madrileña debería hacerlo. Estamos en el Gobierno del Estado, en un gobierno de coalición y creo que es evidente que el hecho de que Podemos esté en los gobiernos está permitiendo que haya avances y transformaciones sociales. Sin ir más lejos, el jueves se aprobó la Ley Trans, a pesar de todas las resistencias que ha habido por parte del resto de fuerzas políticas, incluso desde una parte del Gobierno. Estar consiguiendo medidas como la subida del Salario Mínimo Interprofesional, la reforma laboral o la ley del aborto pone de manifiesto que desde Unidas Podemos sabemos gobernar siendo útiles para la vida concreta y cotidiana de las personas. También gobernamos casi en una veintena de municipios de la Comunidad de Madrid donde estamos poniendo en marcha medidas como la remunicipalización de los servicios públicos en Alcorcón, la creación en Parla de una oficina por el derecho a la vivienda, o en Getafe el dentista municipal.
Suele calificar constantemente la gestión de Ayuso de “desastrosa”. ¿No le concede ningún mérito a la gestión de la presidenta madrileña en estos casi cuatro años?
Me encantaría concedérselo. Si se hubiera puesto en marcha alguna medida que fuera a favor de las mayorías sociales, de la mayoría de los madrileños y madrileños, no tendría ningún problema en reconocérselo. Pero lo cierto es que la señora Ayuso o no hace nada o, cuando lo hace, es en contra del interés general y a favor del 1% de la población. Creo que la política fiscal es el mejor reflejo de cuál es la forma de gobernar y el modus operandi de Ayuso.
Habla del conflicto sanitario por la huelga en la Atención Primaria. El jueves pasado, el comité de huelga y el Gobierno regional llegaban a una tregua y se suspendían temporalmente los paros. ¿Confía en que haya acuerdo?
Soy muy escéptica con las medidas que pueda poner encima de la mesa una presidenta que no escucha a la comunidad afectada por sus políticas. Hay que recordar que esta huelga la están haciendo los sanitarios y sanitarias, no solo por sus derechos laborales, que desde luego podrían ser absolutamente mejores, sino para poder cuidarnos mejor, para poder atendernos con el tiempo que requerimos cada paciente. Yo quiero darle las gracias a los sanitarios por dar esta esta batalla a costa de su propio salario, hay que recordar que llevan en huelga cuatro semanas. Estaría bien que hubiera un gobierno que estuviera a la altura y que acatara las demandas de la comunidad afectada, pero creo que no va a caer esa breva. Hemos visto cómo Ayuso plantea siempre soluciones que no son las que se necesitan. Con el sector del taxi pasa exactamente lo mismo.
Finalmente Vox cumplió su amenaza y el Gobierno regional cierra el año sin presupuestos para 2023 y Ayuso tendrá que prorrogarlos. ¿Cómo afecta eso a los ciudadanos?
Los madrileños deben tomar nota de que las derechas son tan sumamente arrogantes que son incapaces de ponerse de acuerdo y capaces de anteponer sus intereses partidistas, electorales, sus peleas y cuitas internas por encima del bien común y por encima de las necesidades de la Comunidad de Madrid. Es cierto que, de haber tenido un presupuesto, no habría sido el que necesita Madrid. Han dado un espectáculo lamentable. En el Gobierno de coalición tenemos que contar siempre con los socios de investidura para poder aprobar los presupuestos y somos muchos más, y nos acabamos poniendo de acuerdo. Hay cuestiones que tienen que estar por encima de las partidistas y es evidente que el Partido Popular y Vox no están a la altura.
Siempre ha defendido que Yolanda Díaz era la mejor candidata posible para Podemos, ¿lo sigue siendo?
Si ella quiere serlo, estoy convencida de que lo será.