- MÁS INFORMACIÓN | Todo sobre los papeles de Panamá
La Comunidad de Madrid del PP también está en los papeles de Panamá. Lo hace por medio de Edmundo Rodríguez Sobrino, directivo del Canal de Isabel II y uno de los hombrez de confianza del expresidente madrileño Ignacio González. Rodríguez ocupa cargos importantes en tres sociedades situadas en Hong Kong que fueron diseñadas por el bufete Mossack Fonseca, según informa este miércoles El Confidencial. Unas firmas de las que, como admite, no ha informado ni al gobierno de Cristina Cifuentes ni a la Hacienda española.
Las tres sociedades del cargo público madrileño, directivo del Canal desde 2006, fueron creadas en la isla asiática antes de 2012, año en el que España dejó de considerar a Hong Kong como un paraíso fiscal. Son Asia Drilling, Luntam Holding e Idra Dilling, unas sociedades que Rodríguez asegura sirven para construir barcos. Además, las defiende como “necesarias” para financiar “la construcción y explotación de una infraestructura marítima perteneciente a una corporación multinacional extranjera”. Esta última es un cliente de su despacho de abogados, según sostiene.
Rodríguez asegura que no ha informado de su presencia en estas compañías porque “los dueños son extranjeros”. “Nunca he tenido acciones”, explica. Pero su vinculación con ambas es clara, según la documentación a la que ha tenido acceso el Consorcio Internacional de Periodistas de Investigación (ICIJ). En Idra Dilling y Asia Drilling aparece como director junto a I. M., un abogado relacionado con varios futbolistas investigados por fraude fiscal.
El cargo público de Rodríguez es el de presidente ejecutivo de Inassa, filial colombiana de Canal Extensia, la compañía que gestiona contratos de agua del Canal en varios países de Latinoamérica. En los últimos años, según relató el propio directivo en la Asamblea de Madrid, Inassa ha ingresado más de 70 millones de dólares por sus trabajos en varios países latinoamericanos.
A este puesto accedió con González como presidente de la empresa pública por su condición de vicepresidente de Esperanza Aguirre entre 2003 y 2012. La vinculación entre ambos alcanzó otra trascendencia tras el espionaje al exnúmero 2 del PP madrileño en Colombia en 2008, ya que Rodríguez también estuvo en ese viaje.
Rodríguez Sobrino insiste en que no ha cometido “ninguna incompatibilidad” para excusarse de no comunicar estos negocios privados. En España también tiene intereses en diversas compañías, además de su bufete de abogados. Entre ellas están una inmobiliaria o la editoria del diario La Razón.