“Tiene a Lenin en su despacho como persona de referencia”. La portavoz municipal del PP, Esperanza Aguirre, censuró con este argumento a Mauricio Valiente, como persona idónea para gestionar el Plan Estratégico de Derechos Humanos del Ayuntamiento. Valiente es tercer teniente de alcalde, excoordinador de la Comisión Española de Ayuda al Refugiado, además de dirigente del PCE y coportavoz de IU-Madrid.
Aguirre, además, ha recordado que Valiente votó en contra de una moción del PP para “exigir” a las autoridades venezolanas la liberación del opositor Leopoldo López. Los ediles de Ahora Madrid Rommy Arce, Montserrat Galcerán, Yolanda Rodríguez, Pablo Carmona y Carlos Sánchez Mato también votaron en contra de la proposión.
Así, la concejala Alicia Delibes Liniers ha registrado una proposición que se somete a votación en el pleno este miércoles para “instar a la Alcaldesa de Madrid a que proceda a retirar al Tercer Teniente de Alcalde la competencia que tiene atribuida para gestionar el Plan Estratégico de Derechos Humanos del Ayuntamiento de Madrid”.
El plan tiene como objetivo “garantizar el cumplimiento de todas las obligaciones municipales desde un enfoque de derechos humanos”, constituir “una mesa municipal de Derechos Humanos, con representantes de todas las áreas de Gobierno, que coordine su implantación en los servicios y programas del Ayuntamiento” y crear “un Foro por los Derechos Humanos, abierto a toda la sociedad civil, que de forma periódica realizará el seguimiento y evaluación del plan”.
Que la proposición prospere depende del PSOE, toda vez que Ahora Madrid tiene 20 concejales, uno menos que el PP. “Está en debate interno. Aún no está fijada posición”, afirman fuentes socialistas. No obstante, la proposición no tiene eficacia directa ya que es una competencia de la alcaldesa que Valiente siga o no al frente del plan de derechos humanos municipal.
“Forma parte de la estrategia del PP de intentar dividir al gobierno de Ahora Madrid cuando después de casi dos años hemos sido capaces de aprobar presupuestos y el cambio en la ciudad se empieza a notar”, reflexiona Valiente: “Responde a la lógica de sabotear un cambio que es un ejemplo del que puede ocurrir en la región y el país”.
“A pesar de los intentos del PP, el equipo de gobierno y el grupo municipal está unido”, añade Valiente, “aprendiendo día a día y con ilusión de abordar los dos años que restan de mandato. Tengo una relación excelente y toda la confianza de la alcaldesa. Los grupos de la oposición, festejados por la caverna mediática, pretenden dar una imagen de división ante un movimiento que no entienden, que tiene en su base la pluralidad de la unidad popular y que no juega con las reglas estereotipadas de la politiquería en retirada. Más que macartismo, la reacción histérica del PP secundada por los otros grupos responde a la soberbia y el dogmatismo neoliberal que no tiene el monopolio de la interpretación los derechos humanos”.