La Operación Chamartín se ha colado en las negociaciones para articular una candidatura de confluencia en la región de Madrid y en la capital. El desarrollo urbanístico, que ha dividido al Gobierno municipal de Ahora Madrid y del que la alcaldesa Manuela Carmena saca pecho, se presenta como el punto de no entendimiento entre las fuerzas de izquierdas representadas por Más Madrid, Izquierda Unida, Equo, Anticapitalistas y Podemos para llegar a una lista de unidad tanto para el Ayuntamiento como para la Comunidad.
Izquierda Unida ha remitido este lunes un documento a todas las partes en el que insta a la “paralización” de la Operación Chamartín como requisito fundamental para cerrar la confluencia. “Nuestra postura es firme, no vamos a participar en ninguna candidatura que no exija la paralización ni la retirada de la Operación Chamartín”, ha manifestado el líder del Partido Comunista en Madrid, Álvaro Aguilera, tras la reunión que organizaba Izquierda Unida y a la que no ha asistido Podemos.
Aguilera ha admitido que este ha sido el punto de mayor controversia durante la reunión. Desde Más Madrid, la candidatura que lidera Manuela Carmena para el Ayuntamiento e Íñigo Errejón para la Comunidad, se han emplazado a dar una respuesta este mismo martes con una “contrapropuesta”. Pero de entrada las diferencias se antojan insalvables.
Así lo reconocen todos los actores que han estado presentes en la reunión (a excepción de Podemos). Aguilera lo ha definido como “diferencias políticas de fondo” para poder cerrar una lista de unidad. Aunque el líder del PC tampoco ha dado nada por seguro y se ha emplazado a seguir negociando, al igual que Más Madrid que reitera su intención “de sumar a todas las fuerzas progresistas”, mientras reconoce que lo que pide IU no encaja con las intenciones de la alcaldesa Manuela Carmena. Para Carmena, el acuerdo alcanzado con el Ministerio de Fomento y Distrito Castellana Norte es un triunfo que no quiere que le amarguen.
Los planes de la corporación local siguen siendo llevar la aprobación definitiva del proyecto al Pleno municipal antes de las elecciones de mayo, según reiteró el pasado jueves la portavoz del Ayuntamiento de Madrid, Rita Maestre.
IU se ha posicionado desde el principio en contra de este proyecto urbanístico impulsado por el Gobierno de Carmena, sin que su oposición haya supuesto ninguna cesión por parte de la alcaldesa. Izquierda Unida se ha remitido ahora a las informaciones publicadas por eldiario.es las últimas semanas. Este diario desveló los sucesivos contratos hasta ahora secretos que han supuesto modificaciones sustanciales en las condiciones iniciales para el desarrollo del entorno de la estación de Chamartín surgidas de un concurso público en 1993.
“En lo que ha consistido el contrato inicial y sus sucesivas renovaciones es en hacer negocio privado a costa de lo público. Esa ha sido una constante que es imprescindible detener de manera inmediata”, ha defendido IU en el documento remitido a las formaciones políticas.
Desde el equipo de Gobierno del Ayuntamiento de Madrid reiteran que estas informaciones nada tienen que ver con el proyecto que han impulsado. “Nos creemos el proyecto porque es el que hemos planeado desde cero”, apuntan fuentes del Ejecutivo local.
Por su parte, a Anticapitalistas le suena bien la música de Izquierda Unida y califican los planteamientos que establece el documento como “una buena dirección de trabajo para desarrollar un proceso programático democrático”. Destacan además de la paralización de la Operación Chamartín, las primarias participativas que plantean desde IU. La organización ha reiterado después de la reunión de este lunes su intención de confluir al margen de Más Madrid con quienes no comparten, han dicho, “ni las formas personalistas ni su programa de centro izquierda progresista”.
Desde Equo creen que tienen que apostar más por lo que les une que por lo que les separa y celebran que ante todo se apueste por seguir con las negociaciones. El coportavoz del partido ecologista en Madrid, José Luis Nieto, ha defendido que “hay que poner en valor que es mucho más lo que nos une que lo que nos separa. Esta reunión no agota la vía para continuar las negociaciones y hay que seguir trabajando en la línea de tender puentes entre todos los actores políticos”.
Pacto de no agresión
Tras constatar que la Operación Chamartín posiblemente será un punto de no encuentro, los actores presentes en la reunión de este lunes han planteado el siguiente escenario: candidaturas por separado. En este sentido, las fuerzas políticas se han comprometido a evitar la “confrontación”.
“Si este proceso de debate colectivo no fuese capaz de generar un único espacio transformador para la región de Madrid, es necesario comprometerse firmemente a que no se irá a una confrontación constante entre los distintos espacios”, recogía el documento de IU, un punto en el que “todos” están de acuerdo, ha manifestado Aguilera. “Haya acuerdo o no haya acuerdo, no puede haber agresión en ningún caso”.