- La presidenta ha entregado al PSOE un documento marco basado en propuestas ya comprometidas que ahora quiere extender a todos los partidos
El documento marco sobre el que el Gobierno de Cifuentes quiere empezar a construir un pacto de regeneración con todos los partidos está basado en puntos incluidos en sus proyectos de ley que, además, forman parte del acuerdo de investidura firmado con Ciudadanos. El texto se ha vendido como una suerte de código ético común a todos los partidos, que establezca para todos “las mismas reglas del juego”, según las palabras de la presidenta, y que se exigirá a “todos los cargos institucionales y orgánicos”.
El documento enumera algunas líneas rojas para los firmantes como evitar asuntos que puedan generar conflicto de intereses, “no aceptar regalos ni favores que superen los usos habituales, sociales o de cortesía” o no influir en la tramitación de procedimientos administrativos o de contratación pública. El texto también impone la “dedicación exclusiva de los diputados de la Asamblea de Madrid” y la imposibilidad de ser a la vez diputado y alcalde o concejal. Esto ya está recogido en proyectos de ley ya aprobados por el Gobierno y enviados para la tramitación en la Asamblea, donde están bloqueados.
El Gobierno dedica un apartado a listar los supuestos en los que los firmantes tienen que renunciar a su cargo. Y son: “ser investigado formalmente por delitos de corrupción o que por su gravedad causen una especial alarma social”; “ser condenado, aunque no haya alcanzado sentencia firme” o “dar, ofrecer o solicitar de forma directa o indirecta regalos, favores, donaciones, invitaciones o viajes en atención al cargo o responsabilidad que ostente que puedan influir en sus decisiones o en las de terceros para facilitar negocios u operaciones en beneficios propios o de terceros”.
El PSOE evita comprometerse
El PSOE se ha comprometido a “leer y estudiar el documento”, pero evita comprometerse con la iniciativa que pretende liderar la presidenta a 15 meses de las elecciones. El portavoz Ángel Gabilondo ha asegurado en la rueda de prensa conjunta posterior a la reunión que la “confianza está herida” y que la propuesta llega en un “contexto complicado”.
Gabilondo ha afeado al Gobierno que sea ahora y no antes cuando se toma la iniciativa de reunir a todos. “Habría sido más interesante intentar tener un pacto y luego hacer un plan. He escuchado a la presidenta sobre sus plazos y sus tiempos. Queremos preservar la independencia del poder legislativo. Allí tenemos muchas cosas que hacer”, ha indicado el portavoz.
El encuentro de este martes, en todo caso, ha terminado sin acuerdos concretos. La presidenta ha entregado a los socialistas, en cuyo nombre ha acudido también el secretario general del PSOE de Madrid José Manuel Franco, el documento marco a partir del que empezar la negociación y ha reiterado la invitación a los ausentes, Podemos y Ciudadanos, para que reconsideren su postura. Por eso, también les ha enviado a ellos el documento, afirma. Sin ellos, ha dicho el PSOE, el pacto no saldrá adelante en ningún caso.
“Si volvemos a ser convocados, estudiaremos la viabilidad de los caminos que empezamos. Trabajaremos en la asamblea y leeremos este documento [...] No hay un acuerdo entre el Partido Popular y el socialista. No apoyamos la investidura y no hemos aprobado los presupuestos”, ha aclarado Gabilondo.
Proyectos de ley bloqueados
El punto de partida, han dicho los dos representantes, es “llegar a un acuerdo para que las reglas del juego sean las mismas para todos”. “Representamos al 58% del pueblo madrileño, es una representación muy alta pero no significa que entre nosotros vayamos a acordar nada”, ha incidido la presidenta, que ha anunciado que habrá “próximas reuniones” cuando haya dado el tiempo suficiente a los grupos para analizar su documento marco.
El documento marco se basa en los proyectos de ley que el Gobierno ya ha remitido a la Asamblea –el de regeneración democrática y otro para reformar el estatuto de autonomía– y que se encuentran bloqueados en la Cámara. Cada partido responsabiliza a todos los demás de esta parálisis y el propio grupo popular duda de que los textos completen la tramitación parlamentaria antes de que acabe la legislatura.
Este martes, Cifuentes y Gabilondo se han comprometido a “trabajar” para que se produzca este desbloqueo. “Creemos que sería positivo que se desbloquearan esos proyectos de ley. Si se tienen que echar atrás se echen, y si salen adelante, que salgan. Nos hemos dado cuenta de que no se trata solamente un proyecto de ley, es algo más amplio. Ver si somos capaces de buscar unas normas mínimas de actuación”, ha apuntado la presidenta. El consejero de Presidencia y portavoz del Gobierno, Ángel Garrido, y el portavoz del grupo popular, Enrique Ossorio, también han estado en el encuentro.