Jorge García Castaño (San Sebastián, 1977) es el delegado de Economía y Hacienda del Ayuntamiento de Madrid desde el pasado mes de diciembre. Hasta entonces, estaba fuera de la Junta de Gobierno como concejal-presidente del distrito Centro, cargo que mantiene, y de Chamberí. El cese de Carlos Sánchez Mato por negarse a apoyar en el Pleno el acuerdo económico con recortes pactado con el Ministerio de Hacienda de Cristóbal Montoro, le ha llevado a dirigir las cuentas municipales. Su principal reto para este año, era tener un presupuesto que uniera a todo el Gobierno de Ahora Madrid. Lo ha conseguido trabajando mano a mano, como el mismo reconoce, con su antecesor en el cargo.
Su nombramiento al frente de la delegación económica no fue una sorpresa. Castaño es hoy uno de los concejales más próximos a la alcaldesa Manuela Carmena junto con Marta Higueras, Rita Maestre y José Manuel Calvo. Con anterioridad, ha sido diputado en la Asamblea (2003-2011) y también concejal en Madrid en la anterior legislatura, por Izquierda Unida. Abandonó IU en la crisis del partido en Madrid en 2015, unas semanas antes de que lo hiciese Tania Sánchez y otros dirigentes de IUCM, y no se ha reenganchado a la nueva dirección. Sobre si quiere seguir en el Ayuntamiento en 2019, el edil contesta que hará “lo que me diga Manuela Carmena”.
¿Por qué ha tardado el Gobierno cinco meses en tener un proyecto de presupuestos?
Sobre todo porque hay un cambio normativo fundamental que es el decreto 1/2018, que hemos peleado mucho todos los ayuntamientos y que es el que marca el presupuesto. El presupuesto tiene dos claves normativas fundamentales que son el techo de gasto fijado y el decreto del Ministerio de Hacienda que permite multiplicar la inversión a través de Inversiones Financieramente Sostenibñes (IFS). Era fundamental tener ese presupuesto. Luego hay otras cuestiones que estamos haciendo que son básicas para tener un buen presupuesto.
¿Y en qué mejora el presupuesto respecto al plan económico de diciembre?
El decreto del Hacienda que hemos arrancado los ayuntamientos permite ir a una inversión mucho más amplia para poder ejecutarla mejor e incluir nuevos conceptos. Nuevos equipamientos como son colegios infantiles, polideportivos... Eso nos permite llevar la inversión a las IFS y cumplir con el techo de gasto a la vez que destinamos gasto a equidad e igualdad, que son las áreas que priorizamos más, así como la inversión de los distritos del sur, los más necesitados.
Otra cuestión es que tenemos más gasto financiero y lo que vamos a intentar es darle más utilidad a ese gasto financiero. A través del fortalecimiento del sector público de las empresas municipales y a través de otras cuestiones en empresas de impacto social en Madrid.
Los concejales que estaban en el 'no al presupuesto' y que son los mismos que se ausentaron en la votación del plan económico, ¿han impuesto parte de esas mejoras? ¿Ha trabajado conjuntamente con ellos?
Los concejales que no votaron el Plan Económico Financiero (PEF) han aportado mucho y creo que aún pueden aportar incluso más. También creo que el PSOE puede mejorarlo. En todo caso, los datos dicen que el presupuesto ha mejorado sustancialmente al que se contemplaba en el plan económico y eso sobre todo es beneficioso para la ciudad. En esta línea el equipo de Gobierno ha sabido mejorarlo y es algo quiero poner en valor, sobre todo, a los que no veían el plan económico pero que han aportado mucho a este presupuesto.
¿Y esa mejora en el presupuesto no da la razón al exconcejal de Economía Carlos Sánchez Mato que quería plantear un PEF diferente a Hacienda?
El asunto del PEF es que marca un techo de gasto no financiero. En este sentido, yo siempre he pensado que se podía mejorar el plan económico y agradezco mucho a los que han trabajado para ello. Incluso creo que aún puede mejorar más.
¿Entonces ha trabajado mano a mano con Sánchez Mato para elaborar estas cuentas?
Sí, claro. Trabajamos mano a mano cada día, en general.
Como publicó eldiario.es, otra de las exigencias de estos concejales para apoyar las cuentas era un compromiso del Ayuntamiento por escrito para remunicipalizar Madrid Calle 30 como se estableció en el dictamen de la comisión de investigación. ¿Por qué no se ha materializado ese compromiso en el presupuesto?
Porque es un recorrido administrativo muy largo, que es factible pero no puede ser inmediato. Creo que ese recorrido acabará en los primeros meses de 2019 y el impacto presupuestario lo veremos en las próximas cuentas. Pero además hay una parte de la remunicipalización que sí pesaría en regla de gasto y eso nos dificultaría tener un presupuesto más equilibrado. En todo caso, es lo de menos, porque el recorrido administrativo nos lleva a principios de 2019. Y por supuesto hay una negociación por medio y las empresas tienen mucho que decir. Pero nuestra intención es cumplir con el dictamen.
¿Podrá hacerse antes de que termine este mandato?
Sí, sí. Nosotros queremos hacerlo durante este gobierno antes de que lleguen las próximas elecciones.
¿Han hablado ya con el PSOE de este proyecto? ¿Lo han conocido ya?
Voy a meterme lo menos posible en las decisiones del PSOE y en sus cuestiones internas que supongo que son tan complicadas como las de todos. El Partido Socialista ha tenido información constante de la política presupuestaria. Lo que hay que hacer ahora es empezar una negociación más formal, que ellos primero vean los aspectos más importantes del presupuesto ya presentado en Junta de Gobierno. Para ellos era muy importante que fuera a Junta de Gobierno porque entendían que le daba más solidez. Ya está presentado y de lo que se trata ahora es de valorar el presupuesto. También hay que hablar de las ordenanzas fiscales y de otros aspectos de política presupuestaria y llegar a un acuerdo lo más amplio posible. Me puedo equivocar, pero no veo al PSOE en un espacio de bloqueo con PP y Ciudadanos al igual que no veía a Podemos no apoyando a Ángel Gabilondo. En esta comunidad creo que los espacios políticos están muy definidos.
¿Cuándo quiere llevarlo a Pleno?
En el mínimo tiempo posible. Tiene una tramitación larga: hay una fase de información pública, de alegaciones, las enmiendas, las comisiones y luego finalmente la aprobación. Entonces, estamos hablando de que hasta finales de junio o principios de julio no llegará a Pleno y espero que sea aprobado.
¿Es conveniente tener un presupuesto aprobado en julio?
Es importante. Hay cuestiones que sino no podríamos hacer. A parte de subvenciones nominativas que son muy importantes para las organizaciones sociales, para la cooperación, para las políticas feministas... También hay una serie de cuestiones que hemos planteado para la mejora de las empresas municipales, para su fortalecimiento, que no se podrían hacer sin presupuesto y creemos que es importante.
¿Tiene el dato de cuánto se va a ejecutar de deuda este año?
Tenemos un máximo y un mínimo. El mínimo son 477 millones y el máximo llegaría a unos 700 millones según sea la ejecución de estas invenciones de capital en capítulo ocho.
Teniendo en cuenta que durante la legislatura se ha ejecutado mucha deuda y que gran parte de la que queda está protegida por swaps o bonos que tienen sus intereses y sus costes de cancelación. ¿Tienen calculado si este año tendrán que afrontar penalizaciones?
Este año no vamos a tener penalizaciones. En todo caso, estamos elaborando un informe para tratar con Hacienda planteándole el escenarios de los años siguientes porque no tendría sentido, sería antieconómico, incurrir en gastos. Iría contra el propio espíritu de la ley de estabilidad.
Hablando del Ministerio de Hacienda, ¿cómo está la relación actualmente?
Bien. La comunicación es razonablemente buena. Evidentemente Tenemos visiones diferentes en diferentes aspectos como en cuál debe ser la autonomía local. Por ejemplo, nos obligan a unas tramitaciones ridículas cuando se trata de nuestro presupuesto.
A qué tramitaciones “ridículas” se refiere.
Por ejemplo, el dinero que gastamos con IFS es dinero del ayuntamiento, es dinero de los impuestos de los madrileños y madrileñas. Si tuviéramos ese dinero para gastar a 1 de enero, podríamos hacerlo mucho más rápido y mejor y con menos prisas y problemas. Creo que el Gobierno central tiene menos benevolencia con las administraciones locales que la que tienen con ellos la Comisión Europea.
¿Con el conjunto de las administraciones locales o con Madrid en especial?
Con todas en general. En mi opinión es una restricción de las competencias locales.
Esta semana han imputado al secretario de Estado de Hacienda acusado de malversación durante su etapa como alcalde en Jaén. ¿Cree que debe dimitir?
No conozco el caso. Esta última semana han imputado al jefe de la Policía, al de Hacienda, solo falta al exarzobispo. Con la cascada de asuntos que ha habido no he tenido tiempo de analizar la imputación. Ahora mismo no conozco el caso.
No sé si sabe que este secretario de estado dejó en bancarrota las cuentas de Jaén, pero Hacienda no intervino el Ayuntamiento como sí hizo con Madrid y trabaja en el Ministerio. ¿No ve ahí diferencias de trato ya que dice que la intromisión de Hacienda cree que es en general con las administraciones locales?
Hay una intromisión de la autonomía local en toda España. Que haya tratos de favor, pues seguramente.
El acuerdo de presupuestos con todo el Gobierno de Ahora Madrid unido. ¿Es buena noticia para la confluencia de cara a las elecciones de 2019?
La ciudad demanda que haya una propuesta encabezada por Manuela Carmena, que sea democrática, lo más transversal posible y lo más plural posible. La ciudadanía le da un respaldo muy grande a esa apuesta. Cuando la realidad pide una cosa, seríamos muy torpes si la poliquitería nos llevara a que eso no pasara. Creo que va a pasar y que los presupuestos son un buen paso. La aprobación del presupuesto sería una buena noticia para la ciudadanía progresista de Madrid igual que lo ha sido la unión de la izquierda en la moción de censura planteada por Gabilondo. Los presupuestos son un paso importante y yo lo agradezco, pero además soy optimista en los pasos que vamos a dar en adelante.
¿Optimista tanto como para incorporar a los sectores que han sido más críticos con Manuela Carmena?
Creo que sí. Ya veremos luego las fórmulas. Digamos que las características de la apuesta electoral son claras: un liderazgo muy fuerte de Carmena y una opción lo más transversal y lo más plural posible.
¿Tiene que haber primarias?
El objetivo tiene que ser que sea transversal y plural, hay otros elementos que son menores. Yo no estoy en la definición de esas cuestiones, pero hay muchos mecanismos. Nosotros hicimos uno, otras candidaturas hicieron otro... Lo importante es tener claro cómo tiene que ser la apuesta.
¿A otras opciones se refiere a la que escogió la alcaldesa Ada Colau para Barcelona En Comú?
No, necesariamente. Pero no por nada, sino porque no la recuerdo. Lo importante es eso, una candidatura con Manuela Carmena a la cabeza y transversalidad, más transversalidad. No puede ser una candidatura de suma cero de los que ya concurrimos en 2015, eso sería un error.
Estar en el Gobierno nos ha permitido hablar con muchísimos sectores sociales con los que hemos encontrado dinámicas de colaboración que seguramente han servido también para quitar miedo sobre lo que podíamos ser nosotros en el Gobierno. Asociaciones de comerciantes, de otros muchos grupos de interés, de organizaciones sociales... que seguramente tenían muchas dudas de qué iba a pasar con nosotros en el Gobierno. Y lo que han visto es una ciudad mejor, que reduce deuda, que mejora económicamente y tenemos que crecer más. Tenemos posibilidades y ese tiene que ser un objetivo. Tenemos que ser ambiciosos en eso porque va a ser necesario para ganar.
¿Quiere repetir en las listas en 2019?
Haré lo que me diga Manuela. No tengo ningún imput más sobre eso. Digamos que no está en mi mano. Si Manuela me dice que repita, pues repetiré y si no, no repetiré.
¿Seguirá habiendo contratos menores con cooperativas y empresas de la economía social?
Lo que va a haber cada vez más son contratos abiertos. Es lo que está pasando cada año. Hemos triplicado los contratos abiertos. El peso presupuestario de los abiertos ha sido de un 97%, lo diremos en el próximo Pleno. Es decir, este Ayuntamiento probablemente sea una de las administraciones públicas donde más concurrencia hay. No pueden decir lo mismo administraciones donde gobiernan PP y Ciudadanos.
En todo caso, va a haber un apoyo a la economía social cada vez más contundente y eso no es cuestionable. Es una de las apuestas fundamentales de nuestro programa electoral, creemos que tiene sentido económico, creemos que además lo que estamos haciendo es intentar ampliar el sector de la economía social, apoyar la creación de nuevas empresas, es decir, que haya más empresas. Si hay más empresas, habrá más concurrencia.
Sobre este asunto se les ha acusado de tener una “red clientelar” porque el dinero se adjudicaba a empresas o cooperativas con personas vinculadas a Ahora Madrid. ¿Había posibilidad de conceder el dinero a otras empresas sin esos vínculos?
Por desgracia el presupuesto que va a cooperativas en este ayuntamiento es mínimo. A mí me gustaría que fuera más, pero es mínimo. Normalmente, el grueso del presupuesto va a grandes empresas, que no suelen tener relaciones de mucha cercanía con nosotros. La tienen más con otros partidos como estamos viendo con las sentencias [en referencia a la Gürtel].
Lo que están planteando sistemáticamente tanto PP como Ciudadanos es que hay empresas buenas y empresas malas y al final las empresas buenas son las de siempre, las que pasan por caja, y las malas son las que ellos consideran que no deberían existir o no sé cuál es su problema con la economía social. Por cierto, que Gallardón apoyaba la economía social. La mayoría de estas empresa viene teniendo contratos desde hace años con el Ayuntamiento de Gallardón. Plantear como algo raro a Yayo Herrero, es que bueno, no es periodismo de investigación, es cultura general.
Se cumplen tres años desde que Ahora Madrid consiguió los apoyos que le llevaron a la Alcaldía. ¿Qué queda por hacer en este año para volver a convencer a esa gente o a más en las próximas elecciones?
Lo primero que hay que recordar es que hace tres años, si Ciudadanos hubiera sacado un concejal más, hoy sería alcaldesa Esperanza Aguirre porque estoy seguro que si hubiera sido alcaldesa no habría dimitido.
¿Qué nos falta? Yo lo veo sobre todo como concejal de centro donde estoy en lo cotidiano. Es verdad que podemos tener una cierta ansiedad por que las obras que están en marcha en el espacio público para la mejora de la movilidad salgan cuanto antes. En Centro, la transformación va a ser brutal. Pero no solo en Centro, en estas IFS estamos aprobando probablemente la operación asfalto más potente que ha habido en el Ayuntamiento de Madrid. Intervenciones de calles, de zonas verdes, de instalaciones deportivas... Y tenemos que acabarlas o dejarlas muy bien encarriladas. Eso es un aspecto importante para este año: una mejora del espacio público y la mejora de muchos equipamientos que las personas tienen que empezar a disfrutar cuanto antes.
Hay sectores de la sociedad que apoyaron a Ahora Madrid que se sienten decepcionados con la acción de Gobierno. ¿S les puede convencer para que vuelvan a apostar por esta candidatura en 2019?
Fíjate que creo que hay gente que está en ese pensamiento, pero que era una percepción más de hace unos meses. La velocidad del Ayuntamiento a la hora de cumplir con ciertas expectativas es más rápida y se está viendo. En ese sentido el peor momento lo hemos pasado. Suele pasar en todas las legislaturas y con todos los equipos de gobierno, un poco de indefinición a mitad de legislatura. Pero eso va a reducirse los próximos meses. En todo caso, lo que ve la gente que apoyó a Ahora Madrid es que puede haber dudas o críticas en la velocidad pero no en la dirección. No creo que la ciudad quiera volver a la derecha sea con Esperanza Aguirre o con Begoña Villacís. No creo que la ciudad demande eso en absoluto. Pero además, no solo tenemos que convencer a los que ya nos votaron sino que tenemos que crecer y creo que estamos en condiciones de hacerlo. Es importante que eso lo tengamos en la cabeza. Podemos crecer todavía y tenemos opciones de ganar.