Continúa la controversia por las áreas limítrofes entre los barrios de Ciudad Lineal que han aprobado la instalación de parquímetros y aquellos que lo han rechazado. Algunos residentes han denunciado que no pueden disponer de los aparcamientos de su acera de enfrente, al ser zona verde o azul. Lo cual implica además que los de su costado de la calle se congestionan mucho más, debido a que cualquier conductor que no resida en el barrio preferirá aparcar ahí para ahorrarse el coste de estacionamiento. Por todo ello, el tráfico en estas vías se ha complicado ostensiblemente y cada vez es más habitual ver múltiples vehículos en doble fila.
Una de las principales quejas de los residentes afectados tiene que ver con la escasa participación en la consulta ciudadana por la que quedó aprobada o rechazada, en función de cada barrio, la aplicación de estas zonas SER (Servicio de Estacionamiento Regulado). Ventas, San Pascual, Quintana y Colina respaldaron la medida. En Pueblo Nuevo, Barrio de la Concepción, San Juan Bautista y Costillares fue desestimada, mientras que en Atalaya se dio un empate y tampoco se ha implementado.
Los datos que facilita el propio portal de Decide Madrid dan cuenta de la escasa movilización que despertó la consulta. De los más de 190.000 mayores de 16 años empadronados en Ciudad Lineal solo participaron 2.779 ciudadanos, menos de un 1,5% del censo electoral. Por ello, muchos vecinos reclaman al Ayuntamiento una nueva votación que cuente con mayor difusión e información.
Desde el Área de Medio Ambiente y Movilidad del consistorio recuerdan, en conversación con Somos Madrid, que “la ordenanza municipal de movilidad sostenible aprobada en 2021 [el texto íntegro puede consultarse en este enlace] establece que las ampliaciones de las zonas SER deben realizarse siempre bajo demanda vecinal”. Es decir, los afectados por el efecto frontera que deseen extender el área de acción de los parquímetros deberán presentar un escrito a la Junta Municipal del distrito de Ciudad Lineal, según esta portavoz del Ayuntamiento.
La ordenanza dedica un espacio justamente a las calles afectadas por el efecto frontera y establece esta vía de la consulta ciudadana para atajar los posibles problemas: “Para racionalizar el uso del espacio de estacionamiento en superficie y evitar la enorme presión de estacionamiento que sufren algunas zonas del Área de Estacionamiento Regulado, especialmente las limítrofes, se ampliará el SER antes del 31 de diciembre de 2025. Se contará con acuerdo previo favorable de la junta de distrito, tras haber consultado a residentes y asociaciones vecinales”.
En el Ejecutivo que lidera José Luis Martínez-Almeida defiende además que, pese a las protestas vecinales y la escasa participación, esta ampliación de las zonas SER en Ciudad Lineal se llevó a cabo “con todas las garantías jurídicas” y fue discutida tanto en el Pleno municipal como en la Junta del distrito, siguiendo los criterios que establece la ordenanza.
Más Madrid pide agilizar el proceso: “Los vecinos no lo pueden soportar”
La portavoz del grupo municipal de Más Madrid en la Comisión Permanente de Medio Ambiente y Movilidad, Esther Gómez, exige sin embargo mayor flexibilidad para que la situación de los afectados no se dilate en el tiempo, ya que “el Ayuntamiento les ha propuesto un proceso que duraría al menos seis meses”. Así, han solicitado “acelerar los trámites para que se produzca una segunda consulta en los barrios sin SER que han quedado entre dos con parquímetros, para que puedan decidir si se unen o no, una vez que se están produciendo problemas en ellos”.
Gómez recalca que Más Madrid ya advirtió de que estos contratiempos podían producirse en las áreas limítrofes, e incide en la necesidad de una solución de urgencia: “Como ya anticipamos cuando se produjo la consulta y se votó en Pleno dejar fuera de la zona SER a los Barrios de La Concepción y San Juan Bautista, se están produciendo problemas en estos barrios precisamente por quedar encajonados entre otros que sí que tienen el SER. Entendiendo que los vecinos no pueden soportar los problemas que se están produciendo tanto tiempo, así que hemos solicitado acelerar los trámites para que la nueva consulta, y la extensión si así se vota, se realicen antes de acabar el año”.
La concejala lamenta además que, aunque la votación se efectuó a través de Decide Madrid, “no hubo una campaña ni informativa ni de debate previo que ayudara a animar a la gente a votar”, razón por la que según Gómez la necesidad de organizar una nueva consulta se vuelve especialmente acuciante.