Vía libre a la reforma que transformará la calle Doctor Esquerdo, en el tramo que va desde su enganche con el puente de Pedro Bosch, en el cruce de la avenida Ciudad de Barcelona, hasta la plaza de Conde de Casal. La actuación en el distrito de Retiro viene a completar el proyecto de desmontaje del citado puente que se está llevando a cabo y a ofrecer una movilidad más sostenible a lo largo de este espacio, de casi un kilómetro de longitud.
El Ayuntamiento de Madrid afirma que la reforma tiene como objetivo principal “la mejora de la movilidad y la seguridad del tránsito peatonal y ciclista, así como del transporte público colectivo”, para lo que eliminará un carril por sentido para el tráfico normal (actualmente la sección es de dos carriles y uno más para el transporte público) y aprovechará el espacio creado para ampliar las aceras y construir un carril bici segregado y de dos direcciones.
La sección actual de la calle Doctor Esquerdo está constituida por dos calzadas separadas por una mediana central, disponiendo cada calzada de cuatro carriles de circulación (uno para bus y taxi), banda de aparcamiento en línea y aceras. Con la reforma, se eliminará un carril por sentido, dejando dos carriles para la circulación de vehículos y un carril exclusivo para el transporte colectivo.
Con el carril bici, que discurrirá por la acera de los impares, se logrará conectar por vía ciclista segregada la estación de Méndez Álvaro con la de Conde de Casal, a través del puente de Pedro Bosch, donde también está previsto un carril de este tipo.
Además de la calle Doctor Esquerdo, el proyecto incluye las intersecciones con las calles Santa Sabina, Cavanilles, Garibay, Vaderribas, Granada, y Andalucía y el tramo de la avenida Ciudad de Barcelona en su tramo definido por las calles del Cafeto, Catalina Suárez y Caridad. En total, se actuará sobre una superficie de más de 57.000 m2.
El proyecto contempla la renovación completa del pavimento, el mobiliario urbano y el alumbrado público, además de la conservación de todo el arbolado y la plantación de nuevos ejemplares y el ajardinamiento de la mediana central. Asimismo, se rehabilitarán las zonas verdes de esa área correspondientes el distrito de Arganzuela, lo que incluye la rehabilitación de los caminos interiores y la eliminación de las múltiples barreras arquitectónicas existentes. Todo ello con los más amplios criterios de sostenibilidad ambiental.
Las obras tienen un coste de 7,7 millones de euros que, sumados a los del desmontaje del puente, alcanzan los 18,9 millones de gasto para regenerar uno de los grandes ejes viarios de la ciudad. Los trabajos estarán acabados en la primavera de 2023, justo antes de las elecciones municipales.