Los obreros de Ferrovial sacan escombros desde hace días en el número 1 de la calle Vallehermoso. La reciente salida del Samur de estas instalaciones, a principios de mes, ha propiciado que puedan comenzar los trabajos de adecuación del edificio para acoger la futura Casa de México en Madrid.
Los trabajos afectan de momento a la planta baja del edificio, que se ha llenado de andamios. El Ayuntamiento de Madrid ha prometido que este espacio, cedido gratuitamente a México durante 25 años, albergará actividades “de gran contenido cultural y educativo”, dijo en la presentación del acuerdo la alcaldesa, Manuela Carmena.
La idea del consistorio es que se cree “una plataforma abierta, accesible a la ciudadanía donde promover la cultura mexicana, el turismo, el arte popular, la cooperación educativa, científica y técnica, las industrias creativas, la diversidad gastronómica o el deporte”.
El palacete de Alberto Aguilera es en realidad la antigua casa de socorro y Tenencia de Alcaldía del Distrito de Universidad, un espacio de casi 3.000 metros cuadrados que el Ayuntamiento de Madrid prometió en su día al Patio Maravillas, en el que los vecinos de Chamberí pidieron una escuela municipal de música y danza, pero que acogerá la Casa de México en España durante 25 años.
El edificio, que tiene grado de protección integral, es obra del que fuera arquitecto municipal, Luis Bellido, al que se deben numerosas obras en Madrid, como el Matadero y Mercado Municipal de Ganados de Madrid, o la restauración de los edificios de la Plaza de la Villa y el Real Hospicio de San Fernando.