Javier Ramírez (PP) redobla su apuesta por convertir la actual pista de baloncesto en el nuevo polideportivo de Cea Bermúdez en un gimnasio. Tres meses después de que retirara la anterior licitación ante la presión de las familias y de sus propios socios de gobierno, el concejal de Chamberí publica un nuevo concurso para la explotación del centro deportivo municipal que incluye de nuevo trocear la pista para construir en el lugar una gran sala de máquinas y una sala de ejercicios.
El reparto del espacio publicado por el Ayuntamiento de Madrid es el siguiente: la empresa adjudicataria dividirá en tres la actual cancha de baloncesto profesional para crear una sala de actividades de 138 metros cuadrados (6x23 metros), una sala de musculación de 600 m2 y una pista de minibásket de 220 m2 (11x20 metros), en la que también se podría practicar vóley, bádminton y minifútbol sala. Además, habrá otras dos salas destinadas para el gimnasio en la entreplanta de 119 y 75 metros cuadrados. El complejo se completa con una piscina cubierta de 25 metros de largo y 6 calles, además de sus correspondientes vestuarios.
La empresa que gane el concurso tendrá que gastar 120.000 euros en dividir la cancha de baloncesto, con dos enormes cortinas de sectorización e insonorización. “La parte inferior opaca y la parte superior microperforada”, indica el documento de la licitación, que también detalla que estas nuevas paredes deberán llevar el logo municipal. Además, será necesario comprar 48 máquinas para la sala de musculación, con un coste estimado de 156.320,00 euros. Además, para el equipamiento de los vestuarios estima un presupuesto de 40.000 euros.
Ceder las instalaciones a una empresa privada no tendrá ninguna rentabilidad para las arcas públicas. La Junta de Chamberí no cobrará ningún canon a la empresa explotadora de las instalaciones, porque considera que el dinero invertido en trocear la pista y llenarla de máquinas para el gimnasio será suficiente compensación.
Familias y Ciudadanos, en contra
El concejal de Chamberí ha sacado adelante esta licitación a pesar de la fuerte oposición que ha generado dentro del distrito y con sus socios de gobierno, Ciudadanos. Las familias del colegio San Cristóbal y el resto de las Ampas de los colegios públicos del distrito han expresado con cartas, proposiciones en los plenos y dos manifestaciones que el proyecto se ha de quedar como estaba inicialmente planteado: con una pista de baloncesto reglamentaria sin compartimentar.
La vicealcaldesa Begoña Villacís Villacís recordó hace unos días que la competencia en este caso es del concejal del distrito, Javier Ramírez, aunque se comprometió “a seguir peleando por el interés de los vecinos”, especialmente el de los niños, y exigirá al edil que reconsidere su postura.
Ramírez asegura que la demanda vecinal es la construcción de un gimnasio sobre ella por las listas de espera en el Go Fit de Vallehermoso, aunque no tiene en cuenta el cercano polideportivo de Cuatro Caminos: su construcción acaba de ser adjudicada a una empresa, que empezará las obras en los próximos tres meses. Allí ya desapareció del proyecto una pista de baloncesto planificada, que será sustituida por salas de máquinas para gimnasia.
Más Madrid llevará el asunto al próximo pleno del distrito, que tendrá lugar el miércoles 16 de noviembre: “Instamos a la Junta Municipal de Distrito de Chamberí a cumplir los acuerdos alcanzados en Pleno con respecto a la conservación de la pista del Centro Deportivo Municipal de Cea Bermúdez”, reza la proposición en la que pedirán que se paralice la nueva licitación y que se publique de forma “inminente” una nueva en la que “recoja la conservación de la pista polivalente reglamentaria del proyecto original”. A la vez, revuerdan que su conservación se aprobó en el pleno de distrito del pasado mes de abril y, días después, en el del Ayuntamiento de Madrid.
La Junta de Chamberí inició el proceso de privatización mediante troceadoen el mes de marzo, con una licitación de la que no se dio publicidad hasta que este periódico publicó que el equipo de Almeida tenía previsto acabar con la pista polideportiva prevista en su piso inferior, dividiéndola en tres partes de cara a hacer más rentable su privatización. Después de una intensa campaña de las familias de la zona y la presión de Ciudadanos y de partidos como Más Madrid y el PSOE, la Junta de Chamberí decidió en verano retirar la licitación para iniciar otra nueva.
En ese momento cuatro de las nueve empresas invitadas a participar en el concurso renunciaron a presentar ofertas para encargarse de su gestión. Lo hicieron después de visitar las instalaciones y de encontrarse hace unos días con la protesta de las familias del colegio San Cristóbal y de otros colectivos del barrio, que reclamaban la pervivencia de la pista de baloncesto, tal y como había sido diseñada inicialmente. Ahora habrá que esperar para ver qué empresas se atreven a pujar por conseguir este nuevo contrato municipal rodeado de polémica. Tienen hasta el 21 de noviembre para hacerlo.