El jugoso local de la Asociación Gremial del Auto-Taxi de Madrid, que ocupa los números 84 y 86 de la calle Santa Engracia, casi junto a su cruce con Ponzano, acaba de ponerse a la venta. Los taxistas miembros de esta asociació, una de las principales de Madrid, han votado en asamblea su venta para dotar a su asociación de liquidez.
Los taxistas aprueban vender el local -por 237 votos a favor y 83 en contra- para equilibrar “las finanzas de la asociación, lastrada por la gestión de la anterior junta y que ponían en riesgo el futuro de la entidad y sus trabajadores”, han indicado sus responsables. El objetivo es saldar deudas e invertir con los beneficios de la venta en un nuevo modelo de negocio digital que permita a la asociación, una de las de mayor peso en Madrid, competir con el mercado de los VTC.
Lo que se pone a la venta es la planta baja y el sótano de la sede de la Gremial, que se quedará con las oficinas de la parte alta del edificio de cinco alturas situado junto a la gasolinera de la calle. Y que cambia la entrada a la asociación a los accesos desde Ponzano. El local, de una planta de más de 300 metros cuadrados, tiene capacidad para acoger cualquier tipo de comercio mediano.
Los taxistas también aprobaron un cambio en sus estatutos para prohibir la pertenencia a la Gremial de cualquier conductor de una licencia VTC y la expulsión de los actuales socios que trabajen para este nuevo modelo de conducción, que se ha convertido en la principal competencia del sector del taxi en los dos últimos años.