«El nuevo mercado de Barceló ya está terminado. Falta que el Ayuntamiento resuelva unos asuntos con la empresa encargada de dar al edificio el servicio de luz y que nosotros hagamos el traslado. En mayo tenemos que estar abiertos». Así de rotundo se mostraba Manuel Ocaña, el presidente de la asociación de comerciantes de Barceló, el pasado jueves durante una visita al interior del mercado en la que los comerciantes pudieron recorrer sólo las áreas del edificio que acogerán sus puestos.
Nuestros compañeros de Somos Malasaña han tenido acceso a las primeras imágenes del interior del nuevo mercado, un espacio lleno de corredores que aguardan el bullicio típico de la gente deambulando por ellos. En una primera impresión, destacan los múltiples ascensores y escaleras mecánicas que facilitan la entrada al edificio desde distintas calles y que conectan por dentro los diferentes espacios comerciales. Llama la atención la ausencia de luz natural, algo de lo que se han quejado los comerciantes y que es cuanto menos llamativo en un edificio de nueva construcción.
(Imágenes: Somos Malasaña)
Más metros para uso deportivo y aparcamientos para uso privado
Por si el baile de cifras sobre el coste de las obras del Centro Polivalente de Barceló que se pusieron sobre la mesa en marzo, el dilatado aplazamiento del fin de las obras y la planta fantasma del Mercado de Barceló que denunció UPyD en el Pleno Municipal no fueran suficientes, sigue creciendo la polémica.
Según Madridiario, ventidós días antes de la finalización de las obras (el 6 de febrero de 2014) la Junta de Gobierno de la Ciudad de Madrid aprobó la modificación del Plan Especial del Área de Planeamiento Específico 01.03-M Barceló para que se pudiera destinar una planta a uso deportivo y la desafectación de tres plantas de aparcamiento, que inicialmente iban a ser dedicadas a uso de residentes y que pasan a ser para uso privado.
El director general de Planeamiento, Javier Hernández, justificaba en dicha comisión esta decisión debido a la elevadísima demanda de zonas deportivas en la zona. De esta manera, la superficie deportiva queda ampliada de los 2.850 metros cuadrados (entre las plantas 3ª, 4ª y 5ª) a los 3.388 metros cuadrados.
La polémica planta fantasma del Mercado de Barceló
Sin embargo, UPyD insiste en la existencia de esa planta fantasma que el Consistorio niega. Pero, según el Ayuntamiento, la tercera planta se ha entregado en bruto porque, al ser un espacio deportivo, no necesita más obras que su adecuación al uso correspondiente, conforme a lo que se acuerde por el explotador de la actividad.
A la luz de las imágenes facilitadas por UPyD cuesta mucho asimilar que ese espacio pueda ser útil sin las pertinentes obras. Para Mariano Palacios, concejal de UPyD, «todo indica que el operador comercial que tenían previsto para el proyecto original se echó atrás y ahora justifican el cambio de usos de la planta, al igual que la desafectación de tres plantas del aparcamiento previstas para aparcamiento para residentes sin dar argumentos consistentes. Es todo muy raro y los números no cuadran».