Fuentes policiales han confirmado que el hombre que arrolló mortalmente a un joven de 25 años e hirió gravemente a otro en una marquesina de la plaza de Neptuno el viernes pasado conducía bajo los efectos de las drogas y el alcohol. Como consecuencia, la autoridad judicial ha decretado su prisión provisional.
Varios testigos afirman que conducía a alta velocidad y las pruebas practicadas han dado como resultado 1,84 miligramos de alcohol en sangre, es decir, casi cuatro veces más de la tasa máxima permitida actualmente, fijada en 0,50 mg/l. Además, fuentes policiales han confirmado que había ingerido diversas sustancias estupefacientes.
No obstante, no ingresará de momento en la cárcel, a la espera del juicio, porque se encuentra custodiado por dos policías nacionales en el hospital, ya que también resultó herido de gravedad en el accidente. Está acusado de homicidio imprudente, lesiones, daños al patrimonio y conducción temeraria bajo los efectos de sustancias estupefacientes y alcohólicas.
El atropello tuvo lugar alrededor de las 3.00 horas del viernes cuando el conductor de un vehículo perdió el control y arrolló a dos jóvenes que esperaban el autobús nocturno en una marquesina situada en la plaza de Cánovas del Castillo, más conocida como plaza de Neptuno. Otro hombre de 50 años que venía de trabajar pudo apartarse a tiempo y resultó ileso.
A consecuencia del impacto, uno de los jóvenes falleció “por lesiones incompatibles con la vida” después de varios intentos de reanimación por parte de sanitarios del Samur-Protección Civil que llegaron al lugar. Posteriormente, fue trasladado con preaviso al hospital a otro varón joven con fracturas múltiples en tronco y piernas. El conductor del turismo, de 33 años, también fue hospitalizado con un traumatismo craneoencefálico severo.