Seguridad

Los delitos de Lavapiés

Según el Ayuntamiento, el desalojo este miércoles del edificio okupado de La Quimera, ejecutado por cerca de 300 agentes de la policía nacional y municipal a instancias de un juez, redundará en una mejora de la seguridad en el barrio de Lavapiés-Embajadores, donde muchos vecinos llevan meses alertando sobre el aumento de los problemas de convivencia y de la actividad delictiva.

Para el alcalde de Madrid, Martínez Almeida, las quejas sobre inseguridad en la zona “es obvio que es una cuestión que nos preocupa” y, en declaraciones recogidas por Europa Press, afirmaba ayer que La Quimera era “uno de los principales focos de delincuencia de Lavapiés”, por lo que con su desokupación el Ayuntamiento “asume su compromiso con este barrio tan emblemático”, donde el Gobierno municipal está adoptando medidas como la colocación de cámaras de videovigilancia y el aumento de efectivos policiales, que, a juicio del alcalde, son “los dos remedios más eficaces contra el aumento de delitos”.

“Nosotros, ante cualquier atisbo de que pueda producirse un aumento de la delincuencia y de la seguridad o que afecte a la convivencia, actuaremos de manera inmediata, como hemos hecho”, subrayaba Almeida para concluir que “cualquier persona que viene a Madrid o vive en Madrid es consciente de la garantía de seguridad que con carácter general hay en cualquier lugar de esta ciudad”.

Drogas y robos con violencia

Ese aumento de la inseguridad que muchos de quienes habitan o frecuentan el barrio vienen percibiendo y que otros muchos denuncian a diario, en su mayoría a través de las redes sociales, tiene que ver con dos asuntos principalmente, en ocasiones estrechamente relacionados: las drogas y los robos con violencia.

Poniendo cifras y datos objetivos a esas sensaciones, a través de un informe de la policía municipal de Madrid -en respuesta a una petición de Más Madrid- al que ha tenido acceso este periódico, vemos que en cinco meses, entre el 1 de abril y el 31 de agosto pasados, en Embajadores los agentes locales practicaron: 16 detenciones por delito contra la salud pública, 14 detenciones por robo con violencia, 11 detenciones por resistencia ante los agentes de la autoridad, 8 detenciones por violencia de género, 7 detenciones por delito de hurto, 7 detenciones por orden judicial de busca, captura y personación; 5 detenciones por delitos de lesiones, 3 detenciones por delitos contra la seguridad vial, 2 detenciones por delito de agresión sexual y 1 detención por delito contra la propiedad intelectual. 

Según el citado informe, estas actuaciones han estado acompañadas de un incremento del volumen de “patrullaje preventivo policial” y de una vigilancia diaria permanente en las zonas de Nelson Mandela-Ministriles y Tribulete-Arturo Barea, “con el fin de aumentar la tranquilidad de los vecinos”.

Durante todo ese tiempo, La Quimera, donde ayer se detuvieron a 9 personas por delito contra la salud pública por tenencia o venta de sustancias estupefacientes, y a otras 4 por infracción de la Ley de Extranjería, ha sido objetivo principal de vigilancia policial y servicios de Alta visibilidad.