Un bar alejado del centro de Madrid, en una zona residencial junto a la M-30, recibió este martes el homenaje del Ayuntamiento de Madrid por haber servido como punto de reunión de uno de los grupos musicales más conocidos de la capital, los Hombres G. Se trata del Rowland, un local que nació en 1978 en el Parque de las Avenidas y que ahora luce esta distinción municipal.
El Rowland es, según el consistorio, “uno de los lugares de referencia y cita obligada para los amantes de la música” desde que Nano y Chafly lo pusieran en marcha hace 45 años en el número 9 de la avenida de Baviera. En sus instalaciones se han rodado vídeos musicales y películas y ha sido lugar de inspiración para guionistas y escritores.
Fue en los años 80 cuando el grupo madrileño Hombres G lo convirtió en un lugar de culto y peregrinaje para sus fans, ya que este emblemático local aparecía en la letra de sus canciones y videoclips como Visite nuestro bar o en su primera película Devuélveme a mi chica (1987). Con su último proyecto musical, La esquina del Rowland, Hombres G rememoran los buenos momentos pasados en este lugar, cuyas paredes forman parte de la memoria histórica de toda una época y de la gente de Madrid.
La placa la descubrieron el alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, acompañado de la vicealcaldesa, Begoña Villacís, además de otros concejales del Ayuntamiento, después de que el pasado mes de febrero se acordara la distinción en el pleno del distrito de Salamanca, al que pertenece el local.
Almeida tuvo palabras de agradecimiento para Nano y Chafly y para los componentes de Hombres G, “un orgullo para la ciudad, que 40 años después siguen tocando por todo el mundo” y cuyas letras, según el alcalde, “son inolvidables” para los nostálgicos de los años 80 a los que este local, que “ya es de toda la ciudad”, ha proporcionado tan buenos momentos. Por eso, el alcalde deseó este martes “larga vida a los Hombres G y, sobre todo, al Rowland”.
La placa a este local del distrito Salamanca llega después de varios homenajes a otros bares efectuados por el Ayuntamiento de Madrid durante esta legislatura, sin que lleguen a ser centenarios. Hace más de un año se recordaba a La Vía Láctea en Malasaña y también a El Viajero de La Latina. El pasado mes de febrero se descubría otra placa a Casa Lucio, durante un acto un tanto accidentado.