El pasado mes de mayo, el pleno de la Junta de Centro sacó adelante una propuesta de Vox para iniciar el proceso de solicitud de cámaras de seguridad para Malasaña. Entonces parecía un mero trámite, dentro de una votación como las muchas que salen adelante en este tipo de sesiones y luego se acaban diluyendo. El propio concejal de distrito, José Fernández, mostró escaso entusiasmo ante la propuesta de Vox y anunció que habría estudios al respecto. “Esto no puede ser un Gran Hermano”, dijo entonces.
Sin embargo, el alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, ha confirmado este martes la intención del Ayuntamiento de instalar estas cámaras de videovigilancia en la plaza del Dos de Mayo. También lo hará en Plaza Elíptica y estudia, en colaboración con Delegación de Gobierno, llevarlas a Usera y Villaverde.
Según el alcalde, lo hará porque en estos lugares se registran “graves problemas de convivencia, que degeneran en la seguridad”, por lo que quiere “dar tranquilidad a los vecinos” con esta medida. El alcalde no ofreció datos sobre las situaciones de inseguridad que han derivado en esta decisión.
Durante esta legislatura las cámaras han sido instaladas en el barrio de Bellas Vistas (Tetuán) y en Puente de Vallecas, más las que se están instalando en Chueca y Marconi, junto a la renovación de las de Lavapiés y Montera.