Una avería en el suministro a la altura del número 23 de la Gran Vía dejó a buena parte del barrio de Malasaña sin agua desde las 13.30 horas de este viernes 26 de enero. El corte se recuperó levemente durante la tarde pero se extendió de nuevo hasta la madrugada.
La única información que ofreció el Canal de Isabel II, responsable del suministro, es que se había producido “una incidencia en la red de distribución, para cuya reparación se ha tenido que interrumpir el servicio”. El aviso, colgado en su página web, fue alargando el plazo para solucionar la incidencia durante horas.
En el momento en el que se produjo el corte, los técnicos del Canal aseguraron que el agua volvería a correr a las 17.00 horas. Poco después se fijaban las 22.00 horas como nueva fecha. Después a las 0.00 y posteriormente a las 2.07. El sábado por la mañana la incidencia permanecía abierta, aunque el suministro había vuelto a zonas afectadas en la madrugada del viernes al sábado.
El corte de agua afectó a numerosas viviendas de Malasaña. En concreto, este periódico tiene constancia de que los problemas en el suministro se extendieron por la calle Espíritu Santo, Corredera de San Pablo, plaza del Rastrillo o calle Tesoro. Algunos vecinos de Chueca también reportaron problemas puntuales.
La incidencia afectó a numerosos locales de restauración, que en pleno fin de semana vieron cómo no podían lavar sus platos y tuvieron que clausurar sus baños, debido a que los grifos no daban agua ni se llenaban las cisternas de los baños después de su uso.
Al contrario que en otras ocasiones en las que el Canal de Isabel II efectuó cortes en el suministro, Somos Malasaña no tiene constancia de que se efectuara entrega de bolsas o garrafas de agua en la zona por parte de esta empresas de la Comunidad de Madrid. La situación provocó que a última hora del viernes los supermercados del entorno quedaran desabastecidos de botellas.