El suelo se hundió este domingo en la calle San Vicente Ferrer. Un enorme socavón apareció a la altura del número 32 de la calle obligando a cortar el tráfico de paso sobre esta vía, en la manzana que va desde el cruce con San Andrés hasta la calle Dos de Mayo, muy cerca de la Sala Maravillas.
El hundimiento tuvo lugar después de la intensa racha de lluvias del sábado por la noche, provocando que el suelo haya cedido unos 50 centímetros respecto a la altura del resto de la vía. El Ayuntamiento todavía no conoce el origen del socavón, pero va a abrir la vía para examinar cuál puede ser la causa del hundimiento y así poder tomar las decisiones oportunas de cara a proceder a la reparación, informan a Somos Malasaña fuentes del área de Obras y Equipamientos.
De momento, la policía ha colocado un cartel que reza “peligro hundimiento en calzada” para avisar del corte al tráfico después de una intervención inicial de los bomberos el pasado domingo. El acceso a los portales, a la Sala Maravillas y a otros comercios de la zona está disponible a través de las aceras.
El adoquinado de la calle San Vicente Ferrer es uno de los peor conservados de Malasaña. Los baches son constantes en el tramo que va de Fuencarral a San Bernardo, una vía muy frecuentada por camiones de carga y descarga. Recientemente se renovó el asfalto de otras vías cercanas como Espíritu Santo o la Corredera de San Pablo, que se encontraban en situación similar.
Hace ocho años, otro socavón en esta misma calle mantuvo cortado el tráfico durante 9 meses mientras Ayuntamiento, Comunidad y vecinos se pasaban la pelota sobre la responsabilidad de la reparación. Llegaron a salir hasta ratas del agujero.
Actualmente, el tramo de la calle donde se produjo el socavón de 2011 -el que va de San Bernardo hasta Amaniel- no registra ningún tipo de incidencia de este tipo ni baches porque ha sido renovado recientemente gracias a una intervención que eliminó sus bordillos y las plazas de aparcamiento para ampliar el espacio peatonal y plantar árboles.