García Castaño: “La ordenanza alquila la calle a las terrazas a un precio inferior al de mercado”

El debate sobre las terrazas está en pleno apogeo en Madrid. Tanto que protagonizó el pleno del Ayuntamiento este martes, con un animado debate entre los grupos políticos y reveladoras declaraciones del concejal de Centro, Jorge García Castaño, sobre el estado actual y el posible futuro de la regulación de terrazas.

Durante su comparecencia, el concejal de Ahora Madrid respondió con datos al discurso del portavoz del PP, Íñigo Henríquez de Luna, quien le acusó de poner en peligro “3.000 puestos de trabajo” por el -a su juicio- “excesivo control” ejercido sobre las terrazas y veladores instalados en el centro de la capital. Organizaciones sectoriales cifran en un 20% la disminución de veladores en el último año por este control.

Actualmente existen dos turnos de retirada física de terrazas ilegales (uno de mañana y otro de noche), asegura García Castaño, que él considera “más efectivos en algunas zonas” que las simples multas, que llegan como máximo a los 3.000 €. La medida, que consiste en que funcionarios municipales se llevan las mesas y sillas de la terraza ilegal en un camión, “está dando frutos en zonas como La Latina”, indicó en el pleno.

Más terrazas, el mismo espacio

Más terrazas, el mismo espacio

El concejal presidente de Centro también indicó que actualmente hay en el distrito 645 terrazas con licencia, frente a las 611 con las que se encontró Ahora Madrid a su llegada al Ayuntamiento. “No hay esa reducción del 20% y de los 3.000 puestos de trabajo que usted dice”, le espetó a Henríquez de Luna.

El concejal explicó que lo que sí que se han producido es un reordenamiento de terrazas como en la calle Montera o en la plaza de San Ildefonso: “En un espacio limitado, cuando alguien tiene terrazas y otro que que tiene derecho a montarla la pide, hay que repartir el espacio”, indicó. Es lo que ha sucedido, por ejemplo, en la citada plaza de Malasaña, donde el Conache perdió 16 de sus 32 mesas para que los otros dos restaurantes de la plaza, Maki y Naif, pusieran sus mesas en el exterior.

En este caso, el objetivo del Ayuntamiento era que no aumentara la superficie de plaza ocupada por terrazas, pero los dueños de los tres restaurantes se saltaron su permiso e incumplieron el límite de mesas, aunque parece que el restaurante Naif ha decidido ceñirse en los últimos días a sus ocho mesas autorizadas, frente al resto de sus compañeros de plaza que persisten en su competencia desleal al ocupar más del doble de suelo al que tienen derecho.

Así será la nueva ordenanza de terrazas

Así será la nueva ordenanza de terrazas

Casos como el de San Ildefonso han motivado que estén en marcha los trabajos para redactar una nueva ordenanza de terrazas y veladores, cuyo posible contenido adelantó el propio Jorge García Castaño y el concejal del PSOE José María Dávila, que también intervino en el debate.

“La ordenanza de terrazas pasada es una intervención dura en el mercado inmobiliario, la más dura en el zócalo central de la ciudad”, argumentó el concejal de Centro. “El Ayuntamiento alquila a los hosteleros con terraza su tesoro más preciado, el espacio público, a un precio mucho más bajo que el del mercado”; una política que, a su juicio, “está cambiando todo el centro de Madrid”. García Castaño abogó por no convertir el centro de Madrid en un lugar en el que las tiendas “sean el almacén y la venta solo se dé en las calles”, zanjó.

La nueva ordenanza perseguirá frenar también el alto grado de incumplimiento de la normativa por parte de los locales. En este sentido, el dato de expedientes abiertos es demoledor: el 75% de los bares y restaurantes con licencia de terraza en el distrito Centro están expedientados, desveló el concejal de Ahora Madrid.

A tenor de lo que se dijo en el pleno municipal, la nueva ordenanza de terrazas incluirá muy probablemente un adelanto en su horario de apertura en determinadas zonas: comercios en áreas turísticas podrán abrir a las 8.00-8.30 para ofrecer desayunos en el exterior. A cambio, también se contemplaría una limitación de horarios a ultima hora: “Proponemos acortar los horarios nocturnos, que sí provocan más molestias a los vecinos”, añadió el socialista Dávila.

La ordenanza recogerá explícitamente la política de reordenación que está siguiendo el Consistorio: “Las nuevas autorizaciones en zonas de alta densidad supondrán reordenación del conjunto, sin aumentar en superficie ocupada”, indicó García Castaño. “Cuando el espacio está acolmatado, se reparte”.

En cuanto al apartado de sanciones, el concejal de Centro propondrá “que el incumplimiento reiterado de la ordenanza revoque la licencia”, en los casos más extremos. Y también que los locales sancionados no puedan abrir la terraza de nuevo hasta que no hayan pagado las multas.

En cualquier caso, la intención del Ayuntamiento es favorecer procesos de diálogo en mesas de convivencia para que se den ejemplos como el de la plaza del Dos de Mayo, en la que el número de terrazas (8 por local) se acordó con los vecinos: “Donde hay autorregulación y acuerdo, funciona bien el uso del espacio público”, sentencia García Castaño.