La plaza Juan Pujol amaneció la mañana del lunes con un elefante blanco coloreado con mandalas rojos, un visitante temporal (se quedará en este espacio hasta el 27 de junio) que sorprendió a malasañeros y visitantes que pasaban por allí.
La escultura del animal ha pasado a sustituir como rey de los selfies de la plaza a los clásicos esqueletos y recientes flamencos del muro grafiteado ante el que ha sido colocado. Llega por la entrega de los premios IIFA, los conocidos como Oscar de Bollywood, que este fin de semana acoge la ciudad de Madrid.
Dentro de este evento, una conocida marca de cervezas patrocina la colocación de elefantes como el de Juan Pujol, que están siendo distribuidos por todo Madrid. El de Malasaña, además de los mandalas decorativos, ya tiene meadas de perro en sus patas e incluso un tag pintado en su base. Marcas del barrio, que dirían algunos.