El Teatro Barceló dejará de albergar uno de sus eventos más multitudinarios, la Tanga! Party, por haber permitido que la formación ultraderechista Vox celebrara una fiesta con jóvenes el pasado viernes 1 de marzo. Así lo hicieron saber los responsables de este evento el domingo, horas antes de su celebración, mediante un comunicado que publicaron en redes sociales.
La decisión se tomó “ante la gravedad del acto celebrado el pasado viernes (...) completamente incompatible con los valores y filosofía de la fiesta”, explican sus responsables. “Nuestro objetivo es celebrar una fiesta en la que se respete la diversidad y la individualidad de cada uno, donde nuestro público se encuentre a gusto y en libertad. Tenemos una responsabilidad con el colectivo LGTBI y no podemos mirar hacia otro lado ante este tipo de actos cómplices con grupos de ultraderecha”, añaden.
Los organizadores de la fiesta LGTBI, que se celebra mensualmente desde hace tres años, explican que pidieron a los dueños de la sala un compromiso explícito de que no volverían a acoger actos de este tipo, además de “pedir disculpas al colectivo LGTBI”. Al no obtener respuesta decidieron cancelar la fiesta en el Teatro Barceló y la redujeron a la Sala Bat, situada en los bajos del inmueble y con capacidad para menos espectadores (1.000, frente a los 1.200 del Teatro). Inicialmente se iba a celebrar en ambos espacios. La próxima fiesta, a mediados de marzo, se trasladará a la sala de La Riviera.
El Teatro Barceló ha tomado desde hace tiempo la política por bandera de algunos de sus actos. El de Vox del pasado viernes, en el que se ofreció entrada gratuita y cerveza a jóvenes de entre 18 y 30 años y contó con la presencia del secretario general del partido, Santiago Abascal, es el último de los eventos relacionados con el ultranacionalismo que acoge. En 2017 fue polémica la instalación de una bandera de España gigante, días después de la crisis independentista catalana, enseña que retiró días después. Sus DJs también pinchan habitualmente el himno nacional en las fiestas.
Sin embargo, horas después de la publicación de esta noticia y coincidiendo con numerosas críticas hacia la sala por parte del colectivo LGTBI, a la que amenazaron con un boicot, el Teatro Barceló emitió un comunicado condenando los actos de discriminación y prometiendo no volver a albergar eventos como el celebrado por Vox el 1 de marzo.