Miles de madrileños se manifiestan contra los cientos de talas previstas por Metro en la ampliación de la línea 11

Somos Madrid / Europa Press

8 de octubre de 2023 21:00 h

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El movimiento vecinal que intenta salvar cientos de árboles de la tala salió a las calles este domingo, con sus miembros de diferentes barrios de la capital unidos bajo el grito de No a la tala. Intentaba frenar los casi 700 apeos previstos por Metro de Madrid durante las obras de ampliación de su línea 11, que ya han empezado pero que todavía no han arrancado los ejemplares marcados en sus planos.

Fueron miles de personas, unas 5.000 según los organizadores y 2.000 según estimaciones de Delegación de Gobierno, quienes llevaron su protesta a una manifestación que recorrió el centro uniendo los centros de poder de las administraciones responsables de las talas: fue desde Sol -sede de la Comunidad de Madrid, que ejecuta las obras de Metro- hasta Cibeles, espacio que ocupa el Ayuntamiento, quien autorizará los cortes.

El proyecto, que afectaría a zonas como Madrid Río, el parque de Comillas o Arganzuela, fue modificado después de las primeras protestas de febrero y el Gobierno de Ayuso ha bajado de los más de 1.000 árboles que se pretendían talar a los cerca de 700 actuales, aunque no cambia el trazado. Sin embargo, colectivos ecologistas y vecinales siguen insistiendo en que existen otras vías.

“Están destrozando los parques por maltrato y abandono y además talan con excusas tan rocambolescas como la ampliación de línea de Metro”, ha señalado una de las asistentes a la manifestación. Desde las 12 de la mañana y hasta más allá de las 14 horas, los vecinos manifestaron su “disconformidad con la tala masiva de los árboles de la ciudad”. El recorrido, que ha durado algo más de dos horas, ha concluido en Cibeles, donde el actor Pepe Viyuela leyó el manifiesto de la protesta (ver texto completo al final de esta información).

“Si bien en las instituciones europeas se nos ha escuchado, aquí en Madrid el Ayuntamiento, el Gobierno regional siguen haciendo oídos sordos”, ha asegurado Viyuela, haciendo énfasis en el respaldo del Parlamento Europeo y la apertura de su investigación. El proyecto, asegura, es una “obra ilegal”, que incumple seis de las once normas medioambientales y sociales del Banco del Clima.

La vecindad portó desde silbatos que asemejaban el canto de los pájaros y árboles de papel, hasta pancartas con lemas como 'Metro sí, pero no así' o 'Más verde, menos cemento' para mostrar su rechazo a las talas que, según señalan, son evitables.

A la concentración asistió la portavoz del Grupo Municipal Socialista en el Ayuntamiento de Madrid, Reyes Maroto, o el portavoz adjunto de Más Madrid en el Ayuntamiento, Eduardo Rubiño.

“Estamos hoy diciendo una vez más al señor Almeida, que queremos que Madrid sea una ciudad que no siga sometiendo a los vecinos a un dilema que es injusto y que es falso, que es elegir entre una línea de metro que es necesaria y que les quiten los parques que les ofrecen calidad de vida”, apuntó Rubiño ante los medios.

Por su parte, Maroto criticó la ausencia de Almeida, quien, según ha afirmado, “ha preferido irse con la señora Ayuso y el señor Feijóo a Barcelona, en lugar de tener tiempo para los vecinos y vecinas”.

Manifiesto completo leído al final de la manifestación contra la tala

¡Bienvenidos amigos y amigas!

¡Hoy estamos aquí para exigir a quienes nos gobiernan que cuiden y preserven el patrimonio verde de Madrid!

Hace 2 semanas estuvimos en el Parlamento Europeo para pedir su amparo para que las obras de ampliación de la línea 11 de metro se hagan sin destruir los parques y manteniendo gran parte de nuestro arbolado, maduro y de gran porte. Porque se puede, porque hay alternativas viables. Y nos escucharon y nos dieron la razón. METRO Sí PERO NO ASÍ.

Sin embargo, aquí en Madrid, el ayuntamiento y el gobierno regional siguen haciendo oídos sordos y se empeñan en esta huida hacia delante, aunque suponga arrasar con casi 700 de nuestros gigantes verdes. ¡NO A LA TALA!

En Europa, han comprendido que el proyecto que pretende llevar a cabo la Comunidad de Madrid va en contra de lo que hacen otras grandes ciudades europeas, como París, Berlín o Londres. Saben que la crisis climática que nos afecta especialmente a las ciudades de Europa del Sur obliga a luchar contra la contaminación atmosférica y el calentamiento global. Y los árboles y las zonas verdes son nuestros mejores aliados. Hay que renaturalizar las ciudades: Y eso pasa necesariamente por preservar y cuidar los árboles maduros y las zonas verdes que ya existen. Son nuestro tesoro, que debemos cuidar como oro en paño... Por eso en Europa se escandalizan como nosotros ante el arboricidio que pretende cometer la Comunidad de Madrid, con la complicidad del Ayuntamiento. No olvidemos que estas obras se financian con un crédito de casi 400 millones de euros del banco Europeo de Inversiones y ya les hemos informado de las irregularidades del proyecto, como presentar una declaración de impacto ambiental para un proyecto y luego licitar otro diferente mucho más dañino o manipular planos convenientemente para justificar desplazar la estación de Madrid Río dentro del parque de Arganzuela. También les hemos dicho que el proyecto incumple 6 de las 11 normas medioambientales y sociales del llamado Banco del Clima. Y ya lo están investigando.

Es incomprensible que habiendo alternativas viables para hacer las obras de metro de otra manera, la Comunidad de Madrid con la complicidad del Ayuntamiento prefieran cometer este crimen contra el medioambiente y la salud pública, ante un rechazo social además, incontestable y absolutamente transversal.

¡METRO SÍ, PERO NO ASÍ!

Nos decía el otro día Claude Griffat, un eurodiputado francés, que hoy día es de interés general garantizar que se pueda respirar y vivir en las ciudades. Cuidar los árboles maduros y los parques con suelo natural que ya existen es de interés general. Una obligación de nuestras administraciones, que deben procurar salud, bienestar y posibilidad de un futuro mejor a toda la ciudadanía, en especial a los más jóvenes. El pasado 28 de agosto, por primera vez, el Comité de los Derechos del Niño de las Naciones Unidas ha ratificado explícitamente el derecho de los niños y las niñas a vivir en un medioambiente LIMPIO, SANO Y SOSTENIBLE. Ellos y ellas son los MENOS responsables de la crisis climática, pero van a ser los MÁS afectados.

Por eso no vamos a dejar de gritar:

¡Por UN MADRID VERDE Y HABITABLE!

Ahora mismo nuestro patrimonio verde está en peligro. Está en juego la vida de casi 900 árboles afectados en todo el recorrido de la línea 11 de metro: 700 talas y 200 trasplantes, que no son más que talas en diferido.:

  • en el parque de Comillas, uno de los barrios de mayor contaminación atmosférica de Madrid. ¡NO A LA TALA!
  • en el parque de Arganzuela, que goza de protección urbanística especial. ¡NO A LA TALA!
  • en Palos de la Frontera, Jardines de Palestina. ¡NO A LA TALA!
  • en la zona de Atocha en el distrito de Retiro, incluyendo los jardines de Jimena Quirós, que están dentro del Paisaje de la Luz, Patrimonio Mundial de la Unesco. ¡NO A LA TALA !
  • Y en Conde de Casal. ¡NO A LA TALA !

Peligran las raíces de nuestros barrios, lugares con mucha historia y memorias llenas de vida y de recuerdos: 50 primaveras, 50 veranos, 50 otoños, 50 inviernos.

El instinto destructivo de nuestras administraciones es insaciable y lamentablemente el Ayuntamiento también pretende llevarse por delante otros 92 árboles en la obra de aparcamientos municipales entregados al Real Madrid en el paseo de la Castellana.

¡¡También decimos NO A LA TALA!!

¡QUEREMOS UN MADRID VERDE Y HABITABLE!

Porque con la excusa de la rehabilitación de los parques y jardines de nuestra ciudad, están terminando, de manera deliberada, con los pulmones de nuestros barrios, pavimentando las explanadas y terrizos con áridos como zahorra, adoquín, cal y polvo granítico. Además de la incidencia negativa en la biodiversidad de los suelos y zonas verdes, el impacto en el bienestar ciudadano quedó patente en la Termometrada del pasado mes de julio, llegando a registrarse diferencias de hasta 8 grados entre zonas naturalizadas y pavimentadas en un mismo parque.

El objetivo del ayuntamiento es claro: disminuir el ya precario mantenimiento de los parques y zonas verdes, y continuar con el proceso de privatización del servicio municipal de jardinería, a costa de nuestra salud y bienestar.

Nuestro apoyo al parque de Aluche, El Calero, Las Cruces, La Cornisa, Eugenia de Montijo, Parque Sinfonía, parque Zeta, La Almudena ….

¡MENOS PAVIMENTO, MÁS MANTENIMIENTO!

Por desgracia, esto es un suma y sigue… El Ayuntamiento ha retomado la construcción de cantones de limpieza que, cobardemente pararon antes de las elecciones. Han comenzado obras en pleno mes de agosto, incluso en zonas verdes y talando parcelas del Parque Forestal para construir infraestructuras a menos de 100 metros de colegios, comercios y viviendas.

¡VAMOS DE LA MANO CON TODOS ELLOS!

¡POR UN MADRID VERDE Y HABITABLE!

Porque todos los árboles que estamos defendiendo son un recurso insustituible, limpian el aire que respiramos, capturan partículas contaminantes en sus hojas, actúan como grandes aspersores de vapor de agua, nos dan sombra y equilibran las altas temperaturas, algo imprescindible con el INNEGABLE calentamiento global. También proporcionan protección y hogar a la biodiversidad urbana, tan necesaria en nuestros barrios. Nos llenan el alma y son nuestros aliados para mantener y mejorar nuestra salud física y mental.

Por todo ello nos acompañan en esta manifestación.

¡QUE SE LEVANTEN LOS ÁRBOLES!

¡QUE CANTEN LOS PÁJAROS!

¡TODOS LOS BARRIOS UNIDOS POR UNOS PARQUES VIVOS Y VERDES!

¡NO A LA TALA!