Fumata blanca en el área de Obras para la remodelación integral de AZCA. Las doce grandes empresas propietarias del barrio financiero de la capital han llegado a un acuerdo interno para llegar al entendimiento con el Ayuntamiento de Madrid y reformar de forma conjunta la zona.
El acuerdo ha sido sellado acompañado de una imagen que reúne a los representantes de todas las empresas junto con el equipo del área de Obras y Equipamientos y que ha sido publicada por el consistorio. En ella están GMP Sociedad de Inversiones Inmobiliarias, Merlin Properties Socimi, Monthisa Real State 2020, Corporación Financiera Alba, Banco de Crédito Cooperativo Grupo Cajamar, Mapfre, El Corte Inglés, Mutua Madrileña, Generali Real State, Pontegadea, Hi Partners y la Oficina Española de Patentes y Marcas. En el medio de la imagen, una sonriente Paloma García Romero -la delegada del área- celebraba la decisión.
Una vez unidos los empresarios, el consistorio va a comenzar la redacción de un convenio de colaboración público-privada que desembocará en la remodelación de la zona, con financiación de la parte privada, explican a este periódico fuentes del área.
El acuerdo empresarial llega después de casi dos años dando vueltas a Renazca, un ambicioso proyecto de reforma integral presentado por una parte de los propietarios, que implicaba la privatización del corazón financiero de Madrid durante 40 años. El plan, impulsado inicialmente por Merlin y GMP, reunió a varios de los actores de la zona pero se encontró con la oposición de Pontegadea, la inmobiliaria de Amancio Ortega.
Ante el previsible choque de trenes al que derivaba el proyecto, el Ayuntamiento de Madrid descartó la idea el pasado mes de octubre para intentar retomar el acuerdo desde otra perspectiva. La idea era consensuar un documento “que sirva de punto de partida para la materialización del proyecto, que sería ejecutado por el Ayuntamiento aplicando los parámetros de calidad de otras obras estratégicas de la Ciudad como Plaza de España, Puerta del Sol o las Cinco Torres”. Para ello iba a partir del anteproyecto elaborado por Renazca y de las alegaciones ya presentadas. Este documento es el que se ha cerrado hoy entre los 12 propietarios.
Los aspectos que contendrá el convenio público-privado que ahora tiene que elaborar el Ayuntamiento todavía no se han hecho públicos, pero la foto tomada en la azotea de Alcalá 45 revela la intención de todos los actores de sacarlo adelante con consenso.
Un proyecto anterior con polémica
El anterior estudio de viabilidad para el desarrollo de Renazca, ahora descartado, fue sacado a información pública el 1 de agosto de 2022. En él se planteaba la fórmula de cesión por obra para que por vez primera en Madrid un grupo inversor controlara y explotara durante 40 años un enorme espacio público en mitad de Madrid a cambio de ejecutar los trabajos de remodelación. Esta forma de explotación no se contempló durante la presentación pública del proyecto para Renazca en el año 2021, una propuesta de los estudios Diller Scofidio y Renfro que cambió considerablemente desde entonces.
Aunque la mayoría de comunidades de vecinos no puso pegas al desarrollo de este proyecto ahora archivado, que consideraban beneficioso para sus propietarios, lo cierto es que para el resto de madrileños Renazca saldría a pagar: el Ayuntamiento de Madrid acabará abonando más dinero del que recibe por canon de explotación, ya que la promotora tenía previsto cobrar al consistorio por el cuidado de las calles. Tanto PP como Ciudadanos avalaban el proyecto sin fisuras, pero los partidos de la oposición había planteado muchísimas más dudas a su desarrollo. Como también lo hicieron algunos de los propietarios que ahora sí que respaldan iniciar un nuevo convenio.