El Nissan X-Trail ha experimentado dos grandes metamorfosis en sus 20 años de andadura comercial. La primera fue su progresiva transformación de un eficaz todoterreno en un SUV de carácter familiar, un cambio que se afianzó a partir de 2014. La segunda tiene lugar en esta su cuarta generación y tiene que ver, cómo no, con la electrificación, puesto que el modelo japonés se vende a partir de ahora en versiones con alguna clase de asistencia eléctrica, la más avanzada de las cuales es la que brinda la novedosa tecnología e-Power.
Como ya te contamos en este artículo dedicado al Qashqai con este mismo sistema de impulsión, la peculiaridad de los e-Power reside en que el motor de gasolina que incorporan se utiliza solo para generar electricidad, mientras que las ruedas son impulsadas exclusivamente por un motor eléctrico.
Se consigue así que el propulsor térmico funcione siempre dentro de su rango óptimo, lo que permite una mayor eficiencia de combustible, en tanto que la respuesta instantánea y lineal es la parte del rendimiento que hay que adjudicarle a la parte eléctrica del sistema. Dicho de otro modo, el motor de combustión no tiene más función aquí que mantener la pequeña batería, de 2,1 kWh, con carga; es decir, hacer de generador.
En el caso del X-Trail e-Power, existen dos variantes: una de 204 caballos y tracción delantera y otra que, añadiendo un segundo motor eléctrico en el eje trasero, proporciona 213 CV y tracción total; esquema este último que Nissan denomina e-4ORCE y gracias al cual se dispone de varios modos de conducción adicionales para circular por nieve, tierra o barro.
El nuevo SUV está disponible además con tecnología de hibridación ligera, 163 CV y tracción a las ruedas delanteras. El motor de gasolina es el mismo que el de las variantes e-Power, un bloque de tres cilindros y 1,5 litros capaz de variar su relación de compresión. A las tres versiones -mild hybrid y e-Power de 204 o 213 CV- les corresponde el distintivo ambiental Eco de la DGT.
El X-Trail se distingue por la posibilidad de contar con dos plazas suplementarias en una tercera fila de asientos, algo que lo diferencia de muchos modelos de su tamaño (4,68 metros de longitud) y que le permite pescar clientes del segmento superior (D). Se trata de una opción que cuesta 800 euros y con la que podemos acomodar a dos chavales de hasta 1,60 metros de altura en recorridos no muy largos.
El acceso a estos dos asientos se ve favorecido por una apertura sobresaliente de las puertas traseras, de 85 grados. Esta ayuda igualmente a la entrada y la salida desde la hilera intermedia, que dispone además de un desplazamiento longitudinal de 22 centímetros (de serie tanto con cinco como con siete plazas a partir del acabado intermedio de la gama, opcional en el más básico) con el fin de poder otorgar más espacio a los pasajeros o a la zona de carga.
De acuerdo con la medición del fabricante, que sitúa la banqueta deslizante en un punto medio, el maletero cubica 575 litros en el e-Power y 585 en el mild hybrid, pero el dato se acerca a los 700 litros si la situamos en su posición más adelantada.
Un comportamiento mejorado
La nueva generación del X-Trail, a pesar de su vocación familiar, luce un aspecto robusto, de líneas marcadamente verticales y angulosas pero compatible con un aire más refinado y con elementos impensables en su época de todoterreno, como las llantas de hasta 20 pulgadas.
En el interior, el conductor puede disfrutar de una pantalla central de 12,3 pulgadas y un cuadro de instrumentos digital del mismo tamaño, además de la opción de un head-up display de 10,8“. La compatibilidad con Android Auto y Apple CarPlay es inalámbrica, a lo que se suma la incorporación del asistente de voz Alexa, y el catálogo de ayudas a la conducción supera los 30 dispositivos. Especialmente en el nivel de equipamiento Tekna +, el salto adelante en la calidad de los materiales es realmente notable.
Y más que notable es la mejora dinámica que experimenta el vehículo, máxime si se trata de una versión e-4ORCE que se conduce como si fuera un coche más pequeño dada la ausencia de cabeceos, inercias y demás reacciones indeseadas que sentimos incluso cuando la carretera por la que circulamos es muy sinuosa, como era el caso de la escogida para la presentación del modelo, en Eslovenia.
El consumo homologado ronda los 6,5 litros/100 km en el modelo de tracción a las cuatro ruedas, un registro que se corresponde con el que hemos logrado durante nuestra ruta, y baja a 6 litros/100 km en el de tracción delantera. El híbrido ligero gasta entre 7,1 y 7,4 litros/100 km.
La aceleración hasta 100 km/h desde parado le lleva 9,6 segundos a este último, 8 segundos al e-Power de 204 CV y solo 7 segundos al e-4ORCE.
El X-Trail está a la venta desde el 7 de septiembre, tiempo en el que ha obtenido más de 400 pedidos en España. La versión mild hybrid, que será la primera en llegar a sus compradores -en un par de semanas-, se ofrece desde 39.900 euros, mientras que las e-Power salen por 44.460 euros en el acabado N-Connecta, 48.410 euros en el Tekna y 52.310 euros en el Tekna +. El sistema e-4ORCE supone añadir a la factura 3.400 euros.