'Disidencias de género' es un blog coordinado por Lucía Barbudo y Elisa Reche en el que se reivindica la diversidad de puntos de vista feministas y del colectivo LGTBQI.
LGTBIQfobia y edadismo
¿Qué referentes tenemos de personas mayores en el colectivo LGTBIQ? Cada vez tenemos más referentes -Netflix ha capitalizado muy bien la diferencia-, pero la mayoría son jóvenes, guapxs y carismáticxs. ¿Dónde está el LGTBIQ no edadista? Si nos ponemos en plan cínico (y teniendo en cuenta esta nueva ola de romantización del SIDA en series como 'Post', 'It´s a Sin'), como un amigo con VIH dice: “Ay, cari es que piensan que todos morimos antes y como a vosotras no se os ve…”. Y es que el estigma de la enfermedad en los gays y trans y la invisibilidad en las lesbianas y bisexuales/pansexuales sigue vigente en determinados círculos y edades.
Las personas mayores que pertenecen al colectivo sufren múltiples discriminaciones que se ven agravadas con la edad haciéndolas más vulnerables. Así lo desvela el estudio de la FELGTB en su informe Mayores LGTBI: Historia, Lucha y Memoria de 2019 y el reciente estudio de “El Envejecimiento y las diversidades sexuales y de Género” de la Diputación de Barcelona.
Las variables de discriminación percibidas por los participantes de este segundo estudio son: la lgtbiqfobia, el edadismo, la orientación afectivo-sexual, la identidad de género, el género, el estatus serológico y corporal, el nivel de renta, la clase social y/o el origen.
En cuanto al estudio de la FELGTB, un 57% de personas mayores de 60 años considera que su principal necesidad es la visibilidad y la aceptación. Y sus principales preocupaciones valerse por sí mismes (33%) y la soledad (29%). La percepción subjetiva de salud no parece diferente al del resto de población mayor, sin embargo, en lo que respecta a la salud emocional (depresión o ansiedad) afecta a un 32% de personas mayores, sobre todo mujeres cis y trans, siendo el triple que en la población general. Un 65% de las personas con depresión del colectivo tiene pensamientos intrusivos suicidas frente al 40% de la población general. Ambos datos muy preocupantes.
Por otro lado, se pone de manifiesto que los centros de salud tienen un déficit de recursos específicos para las personas mayores LGTBIQ, sobre todo para las personas trans e intersexuales y/o de género no binario. Se refleja en cuestiones como falta de atención y cuidados a algunos aspectos de su salud y un menor ascceso a los recursos sociosanitarios y de cuidados (muy unido a la creciente privatización de estos y a un menor acceso a recursos económicos del colectivo)
En lo que respecta al sentimiento de discriminación, un 27% se siente así en la calle (lo que les empuja a no salir y usar el espacio público) y un 14% en su familia. De hecho, un 56% de las personas encuestadas manifiesta que sus familiares reaccionaron negativamente a sus (mal llamadas) salidas de armario. En cuanto a las situaciones de violencia, el 30% han sufrido agresión física y robo, estas situaciones se perpetran mayoritariamente en parques, comercios y restaurantes. El 60% de las veces por parte de desconocidos. Sin embargo, la decisión más frecuente es no denunciar.
¿Qué referentes tenemos de personas mayores en el colectivo LGTBIQ? Cada vez tenemos más referentes -Netflix ha capitalizado muy bien la diferencia-, pero la mayoría son jóvenes, guapxs y carismáticxs. ¿Dónde está el LGTBIQ no edadista? Si nos ponemos en plan cínico (y teniendo en cuenta esta nueva ola de romantización del SIDA en series como 'Post', 'It´s a Sin'), como un amigo con VIH dice: “Ay, cari es que piensan que todos morimos antes y como a vosotras no se os ve…”. Y es que el estigma de la enfermedad en los gays y trans y la invisibilidad en las lesbianas y bisexuales/pansexuales sigue vigente en determinados círculos y edades.
Las personas mayores que pertenecen al colectivo sufren múltiples discriminaciones que se ven agravadas con la edad haciéndolas más vulnerables. Así lo desvela el estudio de la FELGTB en su informe Mayores LGTBI: Historia, Lucha y Memoria de 2019 y el reciente estudio de “El Envejecimiento y las diversidades sexuales y de Género” de la Diputación de Barcelona.