“Cuando hay demanda pública, no se atiende adecuadamente, y cuando no hay necesidad, se concierta”, afirma Raimundo Benzal, secretario de Educación del PSOE en la Región, ante el reciente anuncio del jefe del Ejecutivo, Fernando López Miras, de ampliar las subvenciones para conciertos de Bachillerato y FP.
López Miras manifestó la importancia de “dar a los padres y madres la posibilidad de que puedan elegir libremente dónde quieren que estudien sus hijos” durante la inauguración del IV congreso ‘Educación: un cambio necesario’, organizado el pasado lunes por la Unión de Cooperativas de Enseñanza de la Región de Murcia (Ucoerm). De modo que a los trece centros de enseñanza no obligatoria que estrenarán subvenciones públicas durante el curso 2018-19, se sumarán otros nueve al año siguiente.
“Esta libertad de elección de centro, sin duda legítima, se puede ejercer como derecho de los padres, pero no como deber de la Administración”, apuntó Benzal. “El PP ve peligrar su futuro político y quiere asegurar el futuro de la educación hacia la oferta privada”, añadió.
“Lo que está pasando es que al Gobierno del PP le está entrando el pánico de perder las elecciones y está hipotecando a futuros gobiernos para que tengan que asumir la educación concertada”, dijo en el mismo sentido Esther Herguedas, responsable de Educación de IU-Verdes.
“La ampliación de los conciertos de Bachillerato y FP anunciada supone un gasto extraordinario para unos presupuestos destinados a la enseñanza pública que no se ha recuperado de los recortes por la crisis”, añadió Herguedas, quien critica que la ratio de alumnos por aula en la educación pública puede alcanzar los 33 alumnos en la ESO y los 38 en Bachillerato.
“Se están retrayendo fondos de la educación pública y en su lugar se dan subvenciones a empresas que se dedican a hacer negocio con un derecho tan importante como es la educación”, señaló la responsable de Educación de IU.
Benzal recordó en un comunicado de prensa que “en su momento se concertaron los centros necesarios” y que, a excepción de las urgencias de escolarización infantil y del crecimiento vegetativo, no encuentra motivos para que el Ejecutivo haya aumentado los presupuestos para la educación concertada en un 80% entre 2007 y 2017.