Desaparecido, en una pelea, atropellado, por comer plástico y de un disparo. Así han ido cayendo, uno a uno, cinco de los ocho linces ibéricos liberados en la Región de Murcia el pasado junio: “Resulta especialmente horroroso que la desaparición de uno de ellos y que la muerte de otro esté claramente relacionada con furtivos”, denuncia Pedro Luengo, portavoz de Ecologistas en Acción. El autor confeso de la muerte del lince Tejo asegura que mató al ejemplar al confundirlo con un jabalí, algo que duda el portavoz de la asociación. “Tenemos una larga tradición en nuestro país en la que los cazadores confunden ciclistas, otros cazadores y otras especies con el animal que iban a cazar”, ironiza Luengo, que recuerda que según el informe de los agentes medioambientales de la Comunidad Autónoma, el disparo al lince tuvo lugar a media distancia. Tras su muerte, el lince fue trasladado varios metros y oculto en la vegetación.
La última lince en fallecer, Turma, fue víctima de un atropello el pasado 17 de noviembre en la autovía de Andalucía a su paso por el municipio almeriense de Vélez Rubio. “Los depredadores necesitan un territorio muy amplio para satisfacer sus necesidades. No puede ser que suelten al lince y al mismo tiempo anuncien el proyecto de la autovía que conecta a Lorca con Caravaca, que va a atravesar uno de los territorios mejor conservados de la Región”, apunta Luengo.
Tanto Ecologistas en Acción como la Asociación de Naturalistas del Sureste (ANSE) afean que la suelta de los linces haya tenido lugar sin un Plan de Recuperación del Lince en la Región: “Una estrategia como la que existe en el Gobierno central, como su nombre indica, establece las líneas maestras de intervención. Pero el aterrizaje a nivel local se debe concretar en el plan de recuperación de la especie”, explica Jorge Sánchez, biólogo en ANSE.
Educación ambiental
Desde el Gobierno regional aseguran que la Estrategia para la Conservación del Lince Ibérico “es el marco en el que se apoyan todas las comunidades autónomas que emprendemos acciones en relación a la conservación de esta especie”, algo que dudan ambas asociaciones ecologistas y naturalistas: “Debería haberse aprobado un Plan de Recuperación que impulsase, entre otros, medidas en el sector cinegético. No hablamos solamente de sanciones, también hay que hacer educación ambiental, potenciar que el conflicto entre la caza y esta especie se reduzca al mínimo”, insiste Luengo. “En la Región han evitado pronunciarse en asuntos medioambientales. Los planes de gestión, manejo y recuperación están por hacer desde hace casi 30 años”, abunda el ecologista.
Para Luengo, la gestión de la suelta del lince en la Región ha funcionado “con el mismo trasfondo con el que se gestiona todo en la Comunidad desde hace décadas”: “Todo es muy mediático, queda todo muy bonito, todo son buenas intenciones, sí. Pero luego no hay nada real, no hay un compromiso real”.
Supervivencia baja
“No sabemos cuales son las cifras de supervivencia en otros lugares. Probablemente sea muy variable y estén muy condicionadas por un efecto simplemente azaroso. Al final son muy pocos individuos y la muerte de unos pocos ejemplares hace una gran diferencia”, reconoce Sánchez. En todo caso, continúa el naturalista, “cuando se reintroduce y se trabaja con fauna silvestre, sobre todo cuando los animales provienen de cría en cautividad, se conoce que su supervivencia tiende a ser baja”.
“La actividad cinegética tiene una importancia en declive porque el número de licencias y el número de cazadores se está reduciendo a pasos agigantados. Pero lo cierto es que explota grandes superficies del territorio nacional y al final es muy raro que se puedan liberar animales en lugares donde no se desarrolle la caza”, lamenta Sánchez. Para el portavoz de Ecologistas en Acción, las carreteras, urbanizaciones o cotos de caza que lindan con el territorio del lince son un “hándicap muy importante para la especie, incluso un riesgo de mortalidad”. El portavoz de Ecologistas en Acción insiste en que las especies animales como el lince necesitan un territorio muy amplio por el que se mueven, se desplazan y van cazando: “La gente tiene que entender que un animal silvestre no es lo que se ve en un zoo, donde se mantiene vivo a un animal en un espacio muy pequeño”.
“Curioso” control de la población
El portavoz de Ecologistas explica que probablemente se dio caza al lince para aumentar la población de conejos u otras especies que depreda esta especie protegida en los cotos de caza: “Algunos hacen lo posible para potenciar la especie que quieren cazar. Pueden soltar ejemplares criados en granja, o eliminar a su depredador natural, que en este caso es el lince”, explica.
En el ámbito de control de población se dan situaciones que Luengo define como “curiosas”: “Por un lado permiten la caza del zorro, pero en ocasiones se dan permisos especiales para la caza de conejos tras las quejas del colectivo de agricultores. Si no se cazase al zorro no habría problema de superpoblación de conejos”, explica.
Otro ejemplo sería el del ciervo, que según Luengo pasó de figurar como especie en peligro en el Catálogo de Especies Amenazadas de la Región de Murcia a declararse cinegética. “No había ningún ciervo y de repente tenemos ciervos para cazar. Lo que ha pasado es que como han empezado a haber conflictos con agricultores, pues se ha facilitado que pase directamente al estatus de especies cinegéticas”, teoriza el ecologista. Sobre este catálogo, la Consejería de Medio Ambiente, Universidades, Investigación y Mar Menor se compromete a actualizarlo.
La Región solicitará más ejemplares
Desde la Consejería de Medio Ambiente, Universidades, Investigación y Mar Menor aseguran que el compromiso del Gobierno Regional con el lince ibérico es “absoluto”: “Es un eje prioritario y va a seguir apostando por ampliar el número de ejemplares en los entornos naturales de la Región”, adelantan.
Desde la cartera de Medioambiente subrayan que el Gobierno regional viene trabajando y colaborando desde hace más de 20 años en proyectos que fomenten la reintroducción y conservación del lince ibérico en la Región. En estos momentos está en marcha el proyecto Life Lynxconnect, que tiene como finalidad “crear un cinturón que una todos los núcleos de población de lince existentes en España (Andalucía, Castilla-La Mancha, Extremadura y Región de Murcia) y Portugal para mejorar el estatus demográfico de la especie”.
La Consejería valora positivamente la suelta de linces de este año: “Tomando de referencia la experiencia de otras Comunidades Autónomas con dilatada experiencia, como Andalucía, las incidencias surgidas en cuanto al resto de ejemplares están dentro de los parámetros de normalidad del programa de reintroducción”, defienden.