El pasado viernes, 30 de septiembre, tras el primer chupinazo de 'El tío de la Pita', se llevó a cabo la lectura del pregón e imposición de bandas a las damas de las peñas festeras en un acto celebrado en la Casa de Cultura al que no faltaron vecinos, amigos y familiares de la pregonera, María Jesús Quesada, así como las peñas festeras, autoridades locales, Corporación Municipal y las visitas del Director del Instituto Nacional de Seguridad Social (INSS) y diputados regionales de PP y PSOE.
Comenzó con la música de un grupo de percusionistas que deleitaron al público con temas clásicos como 'La Vida es Bella', banda sonara de la película que lleva el mismo título. Acto seguido, se impuso las bandas a las cuatro damas de las peñas: La Rosarico, La Cebolla, La Barrecha y La Bota.
Con la presencia de la alcaldesa María Dolores Muñoz se le hizo entrega a la pregonera de la figura del niño 'Baco', muy representativa de la cultura de Bullas ligada al vino desde la época romana.
María Jesús Quesada hizo un pregón muy emotivo y a la vez aplaudido por el público. Echó la vista atrás para recordar cómo vivía de niña las fiestas en un ambiente familiar, hija de un viticultor, creció con tres hermanos y ya desde la infancia sabía que quería ser una más y ser tratada por igual con independencia de su género. Tal y como reconoció, “de niña apuntaba a ser algo rebelde, inquieta y con mucha inquietud por aprender, aunque a la vez era calmada y cumplidora de mis obligaciones”.
Recordó su época juvenil en el coro de la parroquia y cómo comenzó a trabajar en la fábrica donde se unió a un grupo de cinco mujeres para exigir derechos como una nómina, seguridad social, etc. lo que le costó su puesto de trabajo y discusiones con familiares y vecinos, aunque dijo sentirse orgullosa porque después todo eso por lo que lucharon se haría realidad.
Durante su época como mujer emprendedora y trabajadora en la empresa que cofundó en 1987, Quesos Palancares, explicó lo duro que fue tener que encargarse de su trabajo y a la vez la crianza de sus hijos y responsabilidades en casa, pero que se sentía muy motivada. El trabajo le dio alegrías y preocupaciones que con duro esfuerzo fue superando y a día de hoy hizo que el nombre de Palancares siga en el mercado del queso al vino y sea mundialmente conocido. Algo que le produce orgullo y alegría por generar empleo aquí en su pueblo. En este sentido, quiso dedicar todo lo logrado a su marido Juan que falleció por enfermedad.
Finalmente, cerró su lectura del pregón con un vídeo emotivo de fotografías sobre su vida y de Bullas con la música de “Un pueblo es” de María Ostiz. Por supuesto, no faltaron los vivas a la virgen, a las fiestas y a Bullas antes de bajarse del escenario.
El acto del pregón terminó con la alcaldesa, felicitando a todos las fiestas y junto con el Concejal de Festejos, las damas festeras, la pregonera y la Presidenta de la Ruta del Vino de Bullas, Toñi Fernández, se hizo un brindis por los días que están por venir llenos de ilusión y alegría.